Jorge Velasco, ex alumno de TEE: “Elegí Santo Tomás porque tenía mucho prestigio cuando ingresé y sigue teniéndolo”

Conocer la receta del éxito de un profesional que ha conseguido importantes logros en su carrera profesional y de qué forma sus inicios en Santo Tomás contribuyeron a ello materializando la experiencia transformadora del estudiante, fue uno de los objetivos de la participación del ex alumno de Técnico en Educación Especial, Jorge Velasco, quien expuso parte de su historia en el marco de la Jornada de Capacitación organizada por el Área Educación de Santo Tomás Talca el día sábado 27 de julio.

Jorge Velasco ingresó a la carrera de Técnico en Educación Especial en Santo Tomás Talca el año 2010, egresando en 2012 con distinción máxima. Tras esto se desempeñó durante un año en el colegio Juan Luis Sanfuentes y en el año 2013 convalidó algunas asignaturas para matricularse en la carrera de Psicopedagogía en el Instituto AIEP.

Egresó con este nuevo título profesional en 2016 y en el año 2017 ingresa al Programa de Integración Escolar del Liceo Abate Molina de Talca. En este contexto opta por la prosecución de estudios en una universidad santiaguina reconocida por el Ministerio de Educación, obteniendo finalmente su título profesional de Educador Diferencial.

¿Qué fue lo que quisiste transmitir a los asistentes a esta jornada de capacitación?

“Quise contar mi experiencia y la huella que dejó en mí mi paso por Santo Tomás, y cómo a través de la carrera de Técnico en Educación Especial y lo que me entregaron, pude complementar mi vida personal y profesional”.

¿Cómo ha sido este proceso de crecimiento profesional?

“Yo egresé de Santo Tomás de una carrera técnica y me perfeccioné en el camino, entré a estudiar otra carrera y hace poco egresé como profesor de educación diferencial. Eso es a lo que me dedico hoy en día y hace varios años”.

¿Por qué decidiste ingresar a estudiar Técnico en Educación Especial en primera instancia en Santo Tomás Talca?

“La verdad es que opté primero por esta carrera porque no obtuve un buen puntaje en la PSU, pero no quería perder tiempo entonces investigué y la mejor opción me pareció Técnico en Educación Especial en Santo Tomás. Hice este proceso con el apoyo de mi familia, consideré que era una buena opción y me matriculé. Me gustó mucho, trabajé como técnico un año después de egresar. Elegí Santo Tomás porque tenía mucho prestigio cuando yo entré y sigue teniéndolo”.

¿Qué motiva tu interés por la educación especial?

“Desde adolescente siempre me llamó la atención el tema de la discapacidad principalmente y desde ahí mi intención siempre fue estudiar educación diferencial. Si bien no lo pude hacer desde un comienzo, estar en el técnico me ayudó muchísimo en este camino”.

¿Cómo influyó tu formación en Santo Tomás para haber llegado a donde estás hoy?

“Influyó de manera muy positiva porque en TEE la mayoría de las competencias que hasta el día de hoy estoy implementando las aprendí allí. Tener asignaturas ligadas directamente con la discapacidad me abrió las puertas enormemente y tener ramos como braille y lengua de señas me dieron la base para trabajar con mis estudiantes”.

¿Qué trabajo es el que realizas actualmente?

“Me desempeño como profesor de educación diferencial en un programa de integración del Liceo Abate Molina de Talca, trabajo con estudiantes sordos, con estudiantes con diagnóstico de autismo y el año pasado me tocó apoyar a un estudiante con discapacidad visual. Hago trabajo colaborativo con otros docentes también”.

En tu experiencia, ¿Qué importancia tiene la inclusión a nivel escolar y a nivel de educación superior?

“El tema de la inclusión creo que está todavía a años luz de ser realmente inclusión, lamentablemente hay una mirada integradora, pero no inclusiva. Los profesores muchas veces se enfrascan en cosas mínimas y tener un estudiante con discapacidad los limita entonces creen que no son capaces de hacer las clases. Pero desde una mirada inclusiva el apoyo que nosotros brindamos como profesores diferenciales es darles la oportunidad a esos estudiantes de poder integrarse e incluirse y ser uno más de la clase sin mirar sus debilidades sino enfocándose en sus competencias. Respecto a la educación superior creo que también está un poco al debe porque no existen las herramientas ni los profesionales abordando el tema, incluso la PSU los limita”.

¿Qué te parecen los avances en esta materia que ha materializado Santo Tomás para convertirse en una institución inclusiva?

“Me parece muy bueno lo que han hecho, tengo estudiantes que han egresado del Liceo Abate Molina y ahora están estudiando en Santo Tomás porque tienen las herramientas, gracias al apoyo que ha brindado la institución, el centro de aprendizaje, los intérpretes de señas que trabajan con ellos. Quienes están ahí reciben un apoyo diferenciado y creo que Santo Tomás es una buena alternativa en este momento para estudiantes con necesidades educativas tanto permanentes como transitorias dentro de su vida escolar”.

¿Qué mensaje le podrías dar a los estudiantes que están cursando actualmente la carrera de Técnico en Educación Especial?

“Como mensaje les diría que siempre deben ser perseverantes, siempre críticos, nosotros somos agentes de cambio. Les diría que disfruten al máximo lo que tienen en sus manos, tienen la posibilidad de cambiar el mundo y dar un giro importante a la vida de un estudiante. Nosotros gracias a nuestros profesores aprendimos eso, aprendimos a doblarle la mano a las dificultades. La invitación es a no decaer, a ser siempre perseverante y optimista. Cuando uno quiere siempre se puede”.