Tiempos de pandemia: un sistema de abastecimiento en jaque
El pasado 3 de marzo se reportó en Chile el primer caso de persona contagiada por Covid-19, desde aquel entonces el aumento de contagios ha sido exponencial y se ha transformado en una de las crisis sanitarias más grandes que ha enfrentado nuestro país en el último siglo. La rápida propagación del virus y las medidas sanitarias adoptadas por las autoridades han hecho reformular las clásicas formas de trabajar, migrando desde un modelo 100% presencial a uno por teletrabajo en muchos casos. Además, producto de las medidas de distanciamiento social se ha debido reducir el número de trabajadores por turnos en un sinnúmero de industrias para minimizar el contacto entre ellos y reducir las posibilidades de contagio.
Producto de esta pandemia se han visto afectadas muchos tipos de industrias, entre las cuales se pueden señalar empresas manufactureras, industria de alimentos, industria de vestuario, industria de la salud, y supermercados. Sin duda una de las áreas más afectadas en cualquiera de ellas resulta ser la cadena de abastecimiento, lo cual preocupa particularmente en la industria alimentaria, ya que se necesita colocar al alcance de las personas aquellos alimentos necesarios para subsistir durante esta crisis sanitaria.
Las cadenas cortas de suministro y los productores locales de alimentos, que inicialmente se habían visto afectados producto de la globalización y la rápida expansión del mercado de los alimentos (supermercados principalmente), podrían representar una solución en tiempos en los cuales existen una gran cantidad de limitaciones en términos de movilidad personal y disponibilidad de alimentos, permitiéndoles una mayor cercanía a los consumidores (Capelli, 2020).
Para predecir el impacto de los brotes epidémicos en las cadenas de suministro a nivel mundial, basado en una simulación del brote de coronavirus (Ivanov, 2020), se hace una simulación considerando como ejemplo una compañía que vende equipos de iluminación (cinco productos diferentes) y que posee una cadena de suministros de varias etapas (proveedores, fábricas, centros de distribución y clientes localizados en diferentes zonas geográficas). Ver figura 1
La simulación propuesta consideró diferentes escenarios posibles entre los cuales se puede mencionar:
I.- Localización del brote epidémico sólo en China.
II.- Propagación del brote epidémico y cierre de instalaciones a nivel mundial.
III.- Propagación del brote epidémico en los mercados y caída de la demanda en un 50%. Ver figura 2
La simulación consideró el estudio del impacto de un brote epidémico en la cadena de suministros en China, para diferentes duraciones de interrupción y escalas de propagación. Se calcularon indicadores de rendimiento tales como nivel de servicio, ventas, tiempo de entrega, inventario disponible y utilidades para un escenario sin interrupciones y luego diferentes magnitudes de interrupción.
Los resultados mostraron que, para el primer escenario, una mayor duración en la interrupción aguas arriba de la cadena de suministros reduce el rendimiento. Un aumento en la interrupción a 90 días produce una caída en las utilidades de un 90% y un aumento en el tiempo de entrega 15 veces.
En el caso de propagación de un brote epidémico (escenario II), la reacción del rendimiento de la cadena de suministros depende del momento y de la escala de propagación de esta interrupción, así como la secuencia de cierre y apertura de las instalaciones en los diferentes escalones de la cadena en lugar de la duración de la interrupción aguas arriba de la cadena de suministros.
Se puede observar además que interrupciones simultáneas en la oferta y la demanda podría tener efectos positivos en el rendimiento de la cadena de suministros como reacción al brote epidémico. La menor disminución en el rendimiento de la cadena de suministros puede observarse en casos cuando la recuperación de las instalaciones en los distintos niveles de la cadena es sincronizada a tiempo. El impacto más negativo en la cadena de suministros se observa en casos con interrupciones de duración muy prolongadas en las instalaciones y la demanda, aguas abajo en la cadena de suministros, independiente del periodo de interrupción aguas arriba. Esto se explica si las instalaciones en diferentes niveles de la cadena de suministros se cierran simultáneamente, los costos variables y una parte de los costos fijos disminuyen. Por el contrario, si las instalaciones aguas arriba (por ejemplo, los productores en China) están funcionando, pero las instalaciones aguas abajo (por ejemplo, centros de distribución en EE. UU. y Europa) están cerradas, los costos de inventario, fabricación y transporte aumentan, pero no se generan los ingresos.
Para el autor, la observación principal de los experimentos de simulación es que el momento del cierre y apertura de las instalaciones en los diferentes niveles podría convertirse en el factor que más determine el impacto del brote epidémico en el rendimiento de la cadena de suministros en lugar de una duración de la interrupción aguas arriba o la velocidad de propagación de la epidemia. Otros factores importantes son el tiempo de entrega, la velocidad de propagación de la epidemia y las duraciones de interrupción aguas arriba y aguas abajo la cadena de suministros.
Referencias
Capelli, A. (2020). Will the COVID-19 pandemic make us reconsider the relevance of short food supply chains and local productions? Trends in Food Science & Technology, https://doi.org/10.1016/j.tifs.2020.03.041.
Ivanov, D. (2020). Predicting the impacts of epidemic outbreaks on global supply chains. Transportation Research, https://doi.org/10.1016/j.tre.2020.101922.