El Sueño de la Educación Superior, más allá de las Universidades

Diciembre es el mes de las decisiones y desafíos para miles de Jóvenes que rinden la Prueba de acceso a la Educación Superior (PAES).

Históricamente, la Educación Superior en Chile ha sido considerada como un trampolín hacia la movilidad social y el desarrollo personal. Sin embargo, este panorama va más allá de las universidades; la Educación Profesional y Técnica impartida por Institutos profesionales (IP) y Centro de Formación Técnicas (CFT) han desempeñado un papel crucial en la formación de capital humano que responda a las demandas del mercado laboral, especialmente en regiones como el Maule, donde los desafíos sociales y económicos requieren soluciones innovadoras y permanentes de acuerdo con las dinámicas y cambios permanentes del mercado.

En Chile, la Educación Superior Técnico-profesional se establece como una vía educativa fundamental y necesaria para jóvenes y adultos que buscan una inserción rápida en el mundo laboral. De acuerdo con los indicadores de la subsecretaría de Educación Superior, respecto de la matrícula 2024, el 41, 3 % de la matrícula en Educación Superior corresponde a centros de formación técnica (CFT) e institutos profesionales (IP), que han sido diseñados para satisfacer las demandas en cuanto a empleo y productividad local y regional.

En la región del Maule, la Educación Técnico-profesional (ETP) tiene un impacto directo en sectores económicos clave como la agricultura, la agroindustria y el comercio. Con el desarrollo de programas especializados y específicos en estas áreas productivas, los CFT e IP del Maule no solo capacitan a técnicos altamente calificados, sino que además fomentan el desarrollo económico regional.

Así mismo, la Educación Técnico-profesional, se ha convertido en un puente para grupos tradicionalmente desatendidos. En el Maule, se han implementado programas específicos dirigidos a mujeres, personas con discapacidad y jóvenes en contextos vulnerables, promoviendo así su inclusión en sectores productivos estratégicos. Esta iniciativa no solo fortalece el ámbito social, sino que también contribuye a cerrar las brechas en el acceso a oportunidades.

Para los años 2024 y 2025, se anticipa un papel aún más relevante para la Educación Profesional y Técnica, en el marco de las políticas públicas, gracias a una mayor consolidación de la educación gratuita y nuevas alianzas con distintos sectores económicos, es ahí la responsabilidad que tienen las organizaciones tanto públicas como privadas, centrado, la confianza, desarrollo y consolidación de los próximo profesionales y técnicos que dan como resultado un ámbito económico sustentable como país. Estas colaboraciones definitivamente buscan asegurar que los egresados no solo adquieran habilidades técnicas, sino también competencias en innovación y adaptabilidad, cualidades esenciales en un mercado laboral en constante evolución.