Leer, usar tecnología y socializar serían parte fundamental en el reforzamiento de este constructo neurológico que retrasa los signos de la avanzada edad y de algunas patologías asociadas.

Con el fin de der ser parte de la 3era Jornada de Investigación e Innovación en Salud (JIIS 2019) que organiza cada año la Universidad Santo Tomás Talca, le española y experta en neurociencias, María Dolores Roldán llegó hasta el Campus Car el pasado 10 y 11 de octubre para exponer y dictar un workshop a profesionales y estudiantes sobre la Reserva Cognitiva en personas mayores.

María Dolores Roldán, es Psicóloga, Máster en Psicología de la Universidad Complutense de Madrid; Máster en Neurociencias de la Universidad de Andalucía; PhD en Neurociencias de la Universidad de Granada; Profesora Asistente en Neuropsicología de la Facultad de Psicología de la Universidad de Almería y ex Directora del Centro de Alzheimer de Almería CEDAEN.

Ha realizado estadías de investigación en diferentes centros de neurociencia cognitiva y neuropsicología de Dinamarca, Reino Unido, Estados Unidos y España; ha participado en 6 proyectos de neurociencias auspiciados por el Gobierno de España; es autora de capítulos de los libros “Neuropsicología Infantil a través de Casos Clínicos” y “Antidepressants, Antipychotics and Anxiolytics: From Chemistry and Pharmacology to Clinical Application”; es autora y creadora de “REHAPREM” (Program to the Rehabilitation of Children with Cognitive Deficit) y la “CRS” (Cognitive Reserve Scale).

Cuenta con más de 20 publicaciones indexadas sobre neurociencia cognitiva y neuropsicología. Actualmente desarrolla la línea de investigación en reserva cognitiva y musicoterapia en adultos mayores y usuarios con patologías neurodegenerativas.

¿Cómo se puede definir la Reserva Cognitiva?

“La Reserva Cognitiva son todas aquellas cosas que vamos haciendo a lo largo de nuestra vida, que vamos echando como en un saco de conocimiento, de hobbies, de aficiones, que hacen que cuando uno llega a la vejez o a un proceso patológico nuestro cerebro tenga herramientas para poder afrontarlo.”.

¿Cuál es la diferencia entre Reserva Cognitiva y Reserva Cerebral?

“Sí, entendemos que la Reserva Cognitiva son las cosas que vas haciendo durante toda tu vida, por ejemplo, si hablas dos idiomas, si haces música o pintura, la reserva cognitiva es dinámica. En cambio, la reserva cerebral es con lo que naces, tu número de conexiones sinápticas, tus estructuras cerebrales. Es como una diferencia entre algo más estático y algo más dinámico”.

¿Es posible incrementar la Reserva Cognitiva en los adultos mayores?

“Bueno nosotros creemos que sí o si no sería un desastre nuestra investigación. Pensamos que hay muchos hábitos que se pueden llevar a cabo en personas mayores para incrementar la reserva, pero lo que creemos más importante es que ese incremento de la reserva se tiene que realizar desde los primeros momentos de la vida. Es importante realizarlo con personas mayores, pero mientras más joven se haga sabemos que la diferencia es importante”.

¿De qué forma esta reserva hace más lento el envejecimiento y ayuda a prevenir enfermedades como el Alzheimer o la demencia?

“Pensamos que lo que realmente hace la reserva es trabajar sobre nuestras conexiones cerebrales, el cerebro trabaja para llevar a cabo cualquier tipo de funcionamiento en redes, en conexiones entonces lo que creemos que hace la reserva es hacer que estas redes sean más eficientes ni siquiera que hayan más, sino que se gaste la menos energía para llevar a cabo la mejor función, entonces la reserva contribuye a ese aspecto”.

¿Cómo se complementa el tema de la reserva cognitiva con la actividad física?

“No está medida ni existe ningún test todavía, pero pensamos que uno de los elementos que más contribuyen a la reserva cognitiva es la actividad física, de hecho, se conocen los mecanismos biológicos que están a la base de eso. Cuando se realiza actividad física la secuencia de nuestro ADN no cambia, pero la forma en que se expresa sí y el mantener una actividad física – y eso lo hemos demostrado con experimentos- en personas mayores hace que su respuesta sea como si fueran 10 años más jóvenes, o sea, que realmente se están produciendo cambios en la secuencia del ADN”.

¿Es posible medir la Reserva Cognitiva?

“Hay algunas escalas que se desarrollaron para tal fin, una de ellas la realizó mi grupo de investigación y se está traduciendo ya en más de ocho países y siempre se puede mejorar. Nosotros hemos estado utilizando diferentes escalas para medir ese tipo de reserva y siempre nos hemos dado cuenta que falta algo más que incluir, pero sí se han desarrollado en varias partes del mundo escalas para medir la reserva”.

¿Quiénes poseen una menor Reserva Cognitiva son más vulnerables a las enfermedades mentales?

“En general sí y se observa incluso no solo en procesos cognitivos como memoria y atención, sino también en patologías más graves como esquizofrenia o trastorno psicótico. El tener una alta reserva te protege, es como si tuvieras una especie de escudo. Al final el daño está, pero se retrasa muchísimo más y te protege bastante”.

¿Qué recomendaciones se pueden entregar a las personas para que refuercen su Reserva Cognitiva y así puedan tener un envejecimiento activo?

“Sobre todo a las personas mayores se les recomienda llevar una vida muy activa, con actividad física, yo siempre recomiendo la música también, cantar en coros, hacer bailes de salón, tener mucha vida social y luego retos cognitivos. Sabemos que el uso de nuevas tecnologías y la lectura y la escritura protegen, realmente si la reserva cognitiva es lo que por sentido común hemos sabido siempre que nos ayuda a mantenernos más sanos, La música, el deporte y la vida social para mí son las tres claves para una mejor reserva”.

¿Cuál es la tendencia en este ámbito de la investigación en salud y qué se viene a mediano y largo plazo en esta área?

“Nosotros trabajamos en varias líneas, una de ellas deporte y reserva, pero tenemos una muy interesante relacionada con el tema del estrés porque hemos visto que el estrés produce cambios genéticos, el estrés se transmite por generaciones ya que si una persona vive estresada tiene cambios cerebrales y sus hijos también tendrán esos cambios cerebrales. Es estrés está muy relacionado con la enfermedad de Alzheimer y nuestra línea ahora a la que estamos apuntando para dar un salto más es ver si las personas con una alta reserva son capaces de manejar mejor las situaciones de estrés y responder ante tareas altamente demandantes. Esas tareas las medimos a través de realidad virtual para hacer los entornos muy amigables y muy realistas, pero realmente nuestra línea ahora es ver si ese manejo del estrés es modulado por la reserva cognitiva”.

La Dra. María Dolores Roldán durante el desarrollo de JIIS 2019 dictó también un Workshp sobre el mismo tema, pudiendo capacitar a más de 30 profesionales del área salud interesados en esta temática. De la misma forma participó en una charla masiva realizada en dependencias del Mall Plaza Maule junto al Dr. Jordi Peña-Casanova que se denominó “Darle Vida a los Años”.