Proyecto de simulación clínica de Enfermería se desarrolla en UST La Serena

Tras el proceso de recopilación de información iniciado en 2015, el Proyecto de simulación clínica de Enfermería de la Universidad Santo Tomás comenzó a ser parte de la enseñanza de los estudiantes de La Serena, sede escogida como piloto a nivel nacional.

Salas de doble espejo, cámaras de video, monitores y simuladores que mediante maniquíes recrean frecuencias cardiacas, ruidos respiratorios, presión arterial y respuestas fisiológicas a estímulos, entre otros elementos, son parte del nuevo equipamiento a disposición de estudiantes y académicos de la sede para reforzar el aprendizaje práctico de los futuros profesionales de la salud.

“Esta simulación clínica imita la realidad, intrahospitalaria como en APS, en el contexto de la seguridad del paciente que está entre comillas, vivo, pero ante la ocurrencia de errores se pretende que si el alumno se equivoca lo haga en este simulador (descompensación o compensación de un paciente), hecho que no se puede enseñar en aula»

Según indicó la Coordinadora nacional de simulación clínica de la UST, Pamela Paredes Miño, este proyecto se enmarca en el plan de desarrollo de la Facultad de salud y en el plan estratégico de la UST, “y su objetivo es contribuir a la mejora de la calidad de la formación de los estudiantes, integrándolo al modelo institucional con una educación activa, participativa y autónoma, donde el alumno pueda desarrollar el sello Santo Tomás enfocado en el aprendizaje”, especificó.

Uso internacional de la Simulación clínica

La coordinadora detalló además que esta metodología de aprendizaje cuenta con el respaldo de 40 años de utilización a nivel mundial, comprobándose la validez de esta herramienta innovadora. “De esta forma estamos innovando y desarrollando un proyecto de alta calidad con el foco en el estudiante, a fin de que su aprendizaje sea con una visión basada en el desarrollo de competencias declaradas en los perfiles de egreso”, añadió.

“Esta simulación clínica imita la realidad, intrahospitalaria como en APS, en el contexto de la seguridad del paciente que está entre comillas, vivo, pero ante la ocurrencia de errores se pretende que si el alumno se equivoca lo haga en este simulador (descompensación o compensación de un paciente), hecho que no se puede enseñar en aula y que tiene muy contentos a los estudiantes, pues cada experiencia en el simulador finaliza con una discusión guiada y una reflexión”, destaca finalmente la académica.