Jornada de Actualización

El rol del nutricionista es educar, guiar en cambios de conducta y hábitos alimentarios

En la actividad que se desarrolló en la UST Concepción, profesionales del área plantearon el papel del nutricionista en el manejo de Enfermedades Crónicas No Transmisibles, desde la alimentación.

Mejorar la calidad de vida de los pacientes, a través del apoyo profesional y la educación es uno de los roles que debe cumplir el nutricionista cuando se trata de Enfermedades Crónicas No Transmisibles (ECNT). Así se ha demostrado durante los últimos años, en los que se ha definido un tratamiento multidisciplinario para los pacientes con estas patologías que, a nivel mundial, son responsables del 63% de las muertes, según la OMS.
Sin duda la detección precoz es primordial y el cuidado oportuno de estas enfermedades es prioritario. Y en este tratamiento, el papel del nutricionista en el manejo de la enfermedad desde la alimentación es fundamental.
Así lo confirmaron las profesionales que lideraron la Jornada de Actualización en Enfermedades Crónicas, que realizó la Escuela de Nutrición y Dietética de la Universidad Santo Tomás sede Concepción.
Una de las exposiciones estuvo a cargo de la nutricionista de la UST, Lisette Ortiz, responsable del internado intraescolar del colegio San Juan Bautista de Concepción, quien explicó que la prevalencia de la obesidad en la niñez y adolescencia ha aumentado en forma significativa en los últimos años y éste es un comportamiento que incluye a países desarrollados y en vías de desarrollo.
La profesional enfatizó en que un cambio en los hábitos de ingesta y de actividad física y no la baja de peso, debe ser el objetivo más importante en la prevención y el tratamiento de la obesidad y es la recomendación que hacen los expertos en nutrición.

En tanto Fresia Guzmán, especialista en Asistencia Nutricional Intensiva y miembro del Centro de Obesidad de Concepción, señaló que muchas veces las nutricionistas deben intervenir cuando la modificación de hábitos alimenticios se debe hacer a través de cirugías. Mencionó como ejemplo los procedimientos bariátricos, en los que mejorar la calidad de vida del paciente es lo importante.

La académica aclaró que su rol es anterior a la cirugía, preparando al paciente y el terreno para la intervención. “Luego se trabaja en la mantención de a reducción de peso a largo plazo, con la consiguiente mejora de las enfermedades asociadas a la obesidad” subrayó.
Como estas enfermedades requieren apoyo de un equipo completo de profesionales, la jornada incluyó también la mirada desde la Enfermería, a través de la presentación de Macarena Barriga, docente de la UST y colaboradora de la Fundación de Diabetes Juvenil de Santiago, sobre Educación en Terapia Insulínica.
Al finalizar las presentaciones destacó también la nutricionista del Hospital Guillermo Grant Benavente, Carmen Ramírez, quien abordó las patologías del riñón y el rol de la prevención a través de la alimentación.

Enfermedades Crónicas no Transmisibles

Las Enfermedades Crónicas No Transmisibles (ECNT), (denominación de la Organización Mundial de la Salud, OMS) son enfermedades de larga duración, lenta progresión, que no se resuelven espontáneamente y que rara vez logran una curación total.
Dentro del grupo destacan las enfermedades cardiovasculares (ECV), el cáncer, las enfermedades respiratorias crónicas y la diabetes, patologías prevenibles relacionadas a estilos de vida no saludables como tabaquismo, alimentación no saludable, inactividad física y consumo excesivo de alcohol. En Chile, según datos del Minsal, al igual que en la mayoría del mundo, las ECNT son la principal causa de muerte.