Los nuevos desafíos del CAP de Santo Tomás Viña del Mar: generar equipos multidisciplinarios y aportar a la investigación

El Centro de Atención Profesional (CAP) de Santo Tomás Viña del Mar lleva varios años entregando servicios profesionales a la comunidad de la V Región, pero a partir de este 2017 buscará generar un cambio en su propio funcionamiento. Acorde a lo que hoy dicta el mercado laboral y el mundo académico, la idea será instaurar una “cultura de equipo multidisciplinario” para que las carreras trabajen en conjunto cuando sea necesario en la atención de casos. Y en forma paralela, otro objetivo será aportar a la investigación y así construir un sello que distinga a este centro por sobre otros.

Maite Sánchez, docente de la Escuela de Psicología de UST Viña del Mar, asumió hace poco la coordinación del CAP, centro que además anuncia otra novedad para este año: la incorporación de la carrera de Nutrición y Dietética, que se suma a las cinco que ya colaboraban en el recinto (Derecho, Psicología, Fonoaudiología, Trabajo Social y Educación Diferencial).

Precisamente, la llegada de Nutrición y Dietética da pie para iniciar el trabajo multidisciplinario que se quiere implementar en el CAP. “Van a trabajar en equipo con la carrera de Psicología y Kinesiología a través de un proyecto con el Hospital Gustavo Fricke”, señala la académica, quien pone otro ejemplo: “vamos a iniciar un nuevo dispositivo de trabajo de duplas en el área psicosocial. Los alumnos de Psicología se reunirán con los de Trabajo Social y generarán en conjunto las entrevistas iniciales”.

Asumiendo el cambio de paradigma

Según cuenta Maite Sánchez, este trabajo es posible gracias a un cambio de paradigma evidenciado en los últimos años, en el cual cada disciplina reconoce que necesita el apoyo de otras para la resolución de casos. Así, por ejemplo, los fonoaudiólogos asumen que su labor se puede complementar con psicólogos o educadores diferenciales.

“Antes a algunas carreras les ‘hacía ruido’ ser parte de un todo, pero ahora queremos generar sinergia e intercomunicación entre las carreras cuando sea necesario. Queremos instaurar una cultura de equipo multidisciplinario, que haya un diálogo en relación a una visión común del ser humano y cómo podemos aportar a resolver sus necesidades. Y eso lo vamos a hacer respetando cada disciplina, pero al mismo tiempo haciendo crecer la visión de cada disciplina. Es un aprendizaje mutuo”, sostiene.

A este cambio de paradigma se suma que el servicio ofrecido por el CAP ha mejorado gracias a que ya no son solamente alumnos de los últimos años de carrera quienes participan. También hay egresados que bajo el concepto de “post-practicantes” vuelven para aplicar sus conocimientos, ahora como profesionales.

Generar investigación desde el CAP

Otro objetivo declarado para este año es comenzar a generar líneas de investigación que en un futuro cercano permitan dotar de una identidad definida al CAP, diferenciándolo así de otros centros que existan en la región.

“Nuestra vinculación con el medio es óptima, damos respuesta todas las necesidades, pero creo que deberíamos tener especificidad, líneas de investigación y atención específicas. Para eso, insisto, es necesario tener equipos multidisciplinarios preparados para distintas temáticas. Eso nos servirá para investigar y posicionarnos en la región, tenemos que poder levantar investigaciones”, señala.

La idea es que a partir de las bases de datos ya existentes en el CAP, los alumnos puedan realizar no solo sus proyectos de práctica, sino también sus seminarios de investigación, proyectos de tesis o incluso generar investigaciones con estudiantes de otras carreras. “Utilizar esos datos también nos puede servir para evaluar el trabajo del centro, saber qué estamos haciendo mal y qué estamos haciendo bien”, proyecta Maite Sánchez.

Vías de contacto del CAP

Cabe mencionar que quienes son atendidos en el Centro de Atención Profesional llegan por distintas vías. Algunos son derivados desde los municipios, centros de salud o establecimientos educacionales con convenio, pero también existe la opción de que una persona por iniciativa propia recurra al CAP para recibir atención o asesoría en cualquiera de sus áreas de especialización. A todos ellos se les solicita un pago de dos mil pesos.

El CAP de Santo Tomás Viña del Mar está ubicado en Uno Norte 2129, a media cuadra de la Plaza Miraflores.