El pasado jueves 1 de octubre, la Facultad de Economía y Negocios de la UST desarrolló el Seminario “Pensiones: La reforma urgente”, moderado por el Decano Enrique Paris.

En la instancia participaron tres importantes expertos e investigadores para ahondar en el tema que ha sido ampliamente discutido tanto en la sociedad civil como en el Congreso: Paula Benavides, Economista y Magíster en Economía Aplicada de la Pontificia Universidad Católica de Chile; Mariano Bosch, PhD en Economía, London School of Economics, especialista en División de Mercados Laborales, Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y Rafael Sánchez, Ingeniero Comercial y Magíster en Economía de la Pontificia Universidad Católica de Chile; PhD en Economía de la Universidad de Warwick.

Cada expositor entregó su perspectiva -global, regional y local- respecto de las propuestas que se han formulado a lo largo del tiempo en torno a las pensiones. Mariano Bosch, quien dio inicio al seminario, comentó que “estamos en un contexto donde va a haber cada vez más adultos mayores. Esto es un contexto inexorable de envejecimiento que está ocurriendo en Chile y el resto del mundo, pero un elemento que voy a traer a la discusión es que en América Latina y, particularmente en Chile, está ocurriendo de manera acelerada”.

Además, entregó un marco conceptual con los tres elementos principales que integran un buen sistema de pensiones: suficiencia, sostenibilidad y cobertura. En esa línea justificó que los tres grandes desafíos -los que más le preocupan- de la nueva generación de reformas pensionales son:

  • Determinar el objetivo del sistema pensional.

“La pregunta entonces es, ¿quiero que el sistema de pensiones me otorgue el 50% de mi último salario, del 70% de mi último salario, del 100% de mi último salario? Porque si no tenemos ese número muy claro, entonces para mí resulta muy difícil discutir lo que viene después. Entonces mi comentario en este debate es, muchas veces creo deberíamos dar un paso atrás y pensar cuál es el objetivo central del sistema de pensiones y cuál es ese número que estamos persiguiendo, porque eso nos va a dar pistas sobre la tasa de contribución y también de cuáles van a ser los mecanismos más eficientes de financiamiento y compartición”.

  • Eliminar los elementos más regresivos de los sistemas pensionales.

“Probablemente este punto no aplica a la reforma que se está discutiendo en Chile, pero sí es importante para otras partes de la región”.

  • Determinar una senda de ajuste y las instituciones que las gobiernen.

“¿Qué pienso que es más importante en una reforma de pensiones? es este tercer punto. Los países, cuando diseñan su reforma de pensiones, pierden un poco la visión de que no va a haber una única reforma de pensiones y nuestros sistemas de pensiones deberían estar diseñados de tal manera que se vayan ajustando paulatinamente a lo que viene, tanto a la demografía, los cambios económicos y tecnológicos. Entonces, una reforma de pensiones que ocurre sin tener necesariamente algún tipo de senda de ajuste o alguna institución que se haga cargo de la senda de ajuste, pienso que es una oportunidad perdida de esa reforma. Me parece que esto es mucho más importante que los parámetros”.

“Simplificar el sistema”

Por otro lado, Rafael Sánchez del Centro de Estudios Públicos (CEP), se refirió al caso de Chile en particular en base a un trabajo de investigación que realizó dentro de la entidad. Una de las propuestas que entregan es que Chile debería seguir con un sistema de pilares (contributivo, solidario y voluntario) pero con ajustes.

Una de las grandes problemáticas que existe en torno al sistema de pensiones es el escaso conocimiento de los afiliados sobre cómo funciona el mismo.

“Cualquiera que sea el tipo de reforma que implementemos en Chile, yo creo que tenemos que tender hacia un sistema que pueda simplificar dentro de lo posible el sistema, porque eso nos va a permitir una serie de mejoras”.

¿Cuál es el futuro de las pensiones?

Dentro de las propuestas presentadas, Paula Benavides enfatizó que la reforma de pensiones se hace cada vez más urgente como respuesta a los pensionados y trabajadores que esperan un mejor sistema, en un diálogo y construcción de acuerdos que integren diferentes visiones. Los principales puntos que destaca para un cambio son:

  • Nueva institucionalidad sistema de pensiones
  • Mayor participación social de los afiliados
  • Equidad de género como derecho
  • Principio de trato uniforme: establecer un grupo de trabajo especializado que proponga una reforma a los sistemas de pensiones de las Fuerzas Armadas y de Orden y Seguridad

Para Mariano Bosch las pensiones serán una de las políticas públicas dominantes de la región en las próximas décadas, enfatizando que es necesario definir una visión y llegar a través de una serie de reformas (no es una reforma única) y que, en ausencia de una reforma actual, aun así, hay cosas por hacer y avanzar.