Charla de Escuela de Nutrición y Dietética busca respuestas al bajo consumo de Omega 3 en Chile

Alfonso Valenzuela, jefe del Laboratorio de Lípidos del INTA, ofreció una clase magistral en UST Viña del Mar.

¿Por qué comemos lo que comemos? Con esa pregunta, Alfonso Valenzuela, jefe del Laboratorio de Lípidos del Instituto de Nutrición y Tecnología de Alimentos (INTA), dio inicio a la clase magistral titulada “Alimentación y ácidos grasos esenciales Omega 3”, organizada por la Escuela de Nutrición y Dietética de UST Viña del Mar.

El especialista dividió su presentación en dos partes. En la primera, titulada precisamente “¿Por qué comemos lo que comemos? La evolución de la alimentación humana” hizo un ágil repaso por la evolución humana, poniendo énfasis en algunas particularidades de la especie:

“El hombre se transformó en un omnívoro que no está programado para ser omnívoro, se podría decir que es un carnívoro mal adaptado. Somos el único mamífero que maneja mal el colesterol, lo que provoca finalmente los infartos, y además las crías humanas son las únicas incapaces de alimentarse al nacer. Par poder lograrlo, el embarazo debería durar 15 meses, algo imposible porque el crecimiento del cerebro lo impide”, explicó.

La segunda parte de la charla de Alfonso Valenzuela se tituló “Los ácidos grasos Omega 3. Cómo utilizarlos para el desarrollo de alimentos saludables”. Señalando que los ácidos grasos Omega 3 se descubrieron recién en la década de 1970, el representante del INTA indicó que a lo largo de la historia su consumo ha bajado, mientras el de Omega 6, grasas saturadas y grasas totales ha ido en aumento.

Bajo consumo de Omega 3 en Chile

A nivel nacional, señaló que el consumo de Omega 3 está muy por debajo de lo recomendado e incluso por debajo del promedio de América del Sur. Obviamente relacionado con lo anterior, recordó que el consumo de pescado en Chile también es mínimo.

Alfonso Valenzuela también reveló la composición de las principales materias grasas consumidas en Chile, sorprendiendo por la poca o incluso nula presencia de Omega 3 en la maravilla, oliva, palma o maíz. Donde sí es posible encontrar un mayor porcentaje es en la canola (10%) y la soya (7%). En cuanto a los ácidos grasos de vegetales, resalta el aceite de chía, de linaza y de perilla.

Por último, resaltó los efectos metabólicos positivos de su consumo (efectos antiarrítmicos, antitrombóticos, antiinflamatorios, etcétera), señalando la necesidad de buscar mecanismos para incorporar ácidos grasos Omega 3 de origen marino en nuestra alimentación.

Jornada Nutrición Omega 3

Claudia Encina, directora Escuela de Nutrición y Dietética; Alfonso Valenzuela, expositor; Alejandra Ulloa, jefa de carrera; y Pablo Haro, académico.