Centro de Atención Psicológica de la UST Talca continúa capacitando a estudiantes y profesionales para enfrentar la crisis social que afecta al país

Respondiendo al foco estratégico institucional de Conexión e Impacto en la Comunidad, el Centro de Atención Psicológica (CAPS) de la Universidad Santo Tomás Talca ha realizado a la fecha al menos cuatro talleres sobre primeros auxilios psicológicos y a la vez ofrece atención a estudiantes y colaboradores que se sientan afectados por la crisis social que atraviesa el país.

Al respecto el coordinador del CAPS, Braulio Bruna, explicó que es normal que las personas se sientan afectadas tras vivir una situación de trauma que, por estos días, puede ser verse enfrentado a la violencia en las calles en todos sus ámbitos, por lo que cobra gran relevancia la aplicación de los denominados primeros auxilios psicológicos que ayudan a enfrentar estos escenarios disminuyendo la posibilidad de secuelas.

Según explica la Asociación Chilena de Seguridad, los Primeros Auxilios Psicológicos se definen como una herramienta de apoyo pensada en acompañar a aquellas personas que se encuentran en escenarios de crisis y que tienen como objetivo el recuperar el equilibrio emocional, junto con prevenir la aparición de secuelas psicológicas.

Este mecanismo de contención está pensado para ofrecer ayuda de manera práctica y no invasiva, poniendo el foco en las necesidades y preocupaciones inmediatas de las personas, atendiéndolas rápidamente, en la medida de lo posible.

“Para ello hemos estado realizando talleres en la línea de estrategias cognitivo-conductuales en un modelo de la terapia de aceptación y compromiso que tiene disposiciones específicas para trabajar, por ejemplo, con el estrés. Por otro lado, hemos estado enseñando a los alumnos las estrategias basadas en mindfulness para la reducción del estrés”, explicó Braulio Bruna.

Hasta ahora el Centro de Atención Psicológica ha realizado cuatro talleres dirigidos principalmente a estudiantes, docentes y profesionales titulados que requieren la capacitación.

Contenido de los Talleres

El coordinador del CAPS explicó que los primeros auxilios psicológicos siguen la misma noción de los primero auxilios médicos y tiene que ver con la primera ayuda que se presta tras un evento traumático al que se ha visto expuesta la persona, como lo señalamos anteriormente.

“Por ejemplo el hecho de haber visto que carabineros golpea a alguien al lado tuyo, supone un evento que puede ser traumatogénico por el nivel de violencia y en ciertas personas puede hacer que los recursos psicológicos y emocionales con los que está funcionando en ese momento no sean capaces de regular la descarga emocional y la persona sienta que pierde el control. Empieza a sentir un aumento en la angustia y en la ansiedad y empieza a tener síntomas físicos como taquicardia, miedo y el miedo se puede exacerbar hasta el pánico y puedes tener a una persona que está con una crisis de pánico asociada a un estresor”, puntualizó.

Entonces lo que se busca es que la persona salga de la crisis y vuelva al control. En un primer momento a la persona afectada se le debe resguardar físicamente, luego se inicia un protocolo que para los psicólogos se denomina escucha activa que tiene que ver con recibir el relato de la persona y demostrar la disposición correcta en términos de la angustia del otro.

“Los seres humanos tenemos esta capacidad de empatizar con el otro entonces el miedo es súper contagioso. Durante la escucha activa lo que haces es regular tu estado emocional y conductual y tratando de volverte una suerte de espejo de lo que quieres lograr en el otro. En la escucha activa hay que evitar el automatismo con el que funcionamos todos que nos impulsa a decir “no te preocupes”, “todo va a estar bien” o “no pasa nada”. No se debe negar la realidad emocional y objetiva en la que está el otro, si perdiste un ojo no te puedo decir que va a estar todo bien porque no va a estar todo bien. Hay que tener esa ecuanimidad para responder solo sobre las preguntas específicas de orientación en un tono de calma”, agregó Bruna.

La segunda fase de los primeros auxilios psicológicos tienen que ver con la readecuación de la respiración que es fundamental para el control de los estados emocionales como la angustia y la ansiedad. “Uno piensa que cuando está angustiado debe tomar harto aire para aliviarse y es al revés, la hiperventilación en la angustia hace que se eleven demasiado los niveles de oxígeno y bajen los de CO2”.

Una vez que la persona está más en control, se deben priorizar los problemas para poder jerarquizarlos.

“Después viene un proceso de derivación en el caso que se considere que lo que le ocurrió a la persona es lo suficientemente serio como para que acuda a instancias de salud específica con otros profesionales. Finalmente viene todo un proceso de psicoeducación en términos de lo que es el estrés. En personas normales que están expuestas a estresores severos lo más probable es que se generen cuadros asociados al estrés, aunque no a todos nos pega igual. La idea es mostrarles lo que puede ocurrir como falta de sueño o apetito, por ejemplo, y ayudarlos a reconocer esos síntomas para su tratamiento antes que lleguen a un estrés post traumático”, concluyó.