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UST celebró el Día de la Ingeniería en Chile con reflexión sobre la participación de mujeres en carreras del área STEMElizabeth Núñez, Dra. en Enfermería y académica de la USACH: “La profesión de la Enfermería está consolidada y armada. Ahora tenemos que avanzar en más ciencia propia”
La Escuela de Enfermería de la Universidad Santo Tomás celebró el Día Internacional de la Enfermería con charla sobre la historia, el presente y el futuro de la institucionalidad profesional.
El miércoles 12 de mayo estudiantes de Santo Tomás asistieron a la charla “Institucionalidad de la Enfermería chilena: historia, presente y futuro”, dictada por la Dra. en Enfermería y académica de la Universidad de Santiago de Chile, Elizabeth Núñez, en el marco de la celebración del Día Internacional de la Enfermería.
Claudia Ibarra, directora nacional de la Escuela de Enfermería de la Universidad Santo Tomás, dio la bienvenida a las y los asistentes, y aprovechó la oportunidad para reconocer la importante labor que alumnos, alumnas y egresadas tomasinas están desempeñando en medio de la crisis sanitaria por Covid-19. “Nuestros estudiantes han estado en la primera línea en los hospitales, colaborando con el plan de vacunación y la trazabilidad”, señaló. “A las y los enfermeros nos representa la fuerza, y este año nos ha hecho mucho más fuertes. Pero es una fuerza flexible, que se acomoda al cambio. Nos hemos vuelto más innovadores”, agregó.
La decana de la Facultad de Salud de la UST, Dra. Gisela Alarcón, reforzó el reconocimiento a la labor de los estudiantes tomasinos del área de la salud que, dijo, “han estado en la lucha diaria contra el Covid-19”. También agradeció especialmente a la Escuela de Enfermería por haber tenido hace algunos años la visión de instalar un modelo comunitario, cercano a los territorios y a la atención primaria, que hoy resulta relevante en la atención de mitigación del virus.
“Desde antes de la pandemia tuvieron la visión para poder instalar un modelo comunitario, que está más pertinente que nunca, porque situaciones graves como la pandemia se resuelven en la comunidad, con las personas y en el primer nivel de atención”, declaró.
Elizabeth Núñez, doctora en Enfermería y académica de la Universidad de Santiago de Chile, revisó la historia de la institucionalidad de la profesión, que surgió en Chile alrededor del 1900 y que se afianzó con la creación de la Escuela de Enfermería del Estado en 1906. “La necesidad de formar enfermeras emerge en un contexto de carencia social y de necesidad de salud relacionada con la cuestión social”, expuso.
Entre 1900 y 1920, gran cantidad de la población chilena vivía hacinada en conventillos, con escasas condiciones de salubridad y numerosas necesidades básicas no resueltas. En ese contexto surge la formación de las enfermeras, que tendría un largo recorrido para llegar a lo que es hoy.
“La formación en Enfermería en sus primeros 50 años (1900-1950) se caracterizó por estar subordinada a la Ciencia y a la Medicina, por el escaso número de profesionales, por un status social y económico no reconocido y por ser una profesión feminizada”, expuso Núñez.
En 1930 aparecerían voces reclamando el reconocimiento profesional de las enfermeras, que hasta entonces eran vistas como una secretaria o una extensión del médico, aunque eran personas formadas con bagaje científico suficiente para ser autónomas. “El año 50 es clave para la Enfermería en Chile. Se conforma el Colegio de Enfermeras, que nace desde este grupo de pocas mujeres que se convierten en profesionales, que son pocas, y que empiezan a cruzarse con la ola feminista”, cuenta Núñez. Estas primeras enfermeras organizadas buscaban la representación social, económica y técnica de la Enfermería.
Hoy la profesión de la Enfermería posee el reconocimiento social que tanto buscó en los primeros años de formación, y que incluso se ha reforzado durante la pandemia por Covid-19. “Ya no hay que seguir luchando por el reconocimiento. La profesión de la Enfermería ya está consolidada y armada. Tenemos un prestigio logrado”, señaló Núñez.
Mirando al futuro aparecen distintos desafíos, ya no de reconocimiento sino de profesionalización. El avance en más ciencia propia de la Enfermería, la certificación profesional y de especializaciones y la globalización de la educación en Enfermería son algunos de los desafíos identificados por la Dra. Elizabeth. A su vez, Núñez prevé un escenario en el que las y los enfermeros tendrán cada vez más presión por cuidados seguros y oportunos de parte de la ciudadanía.