Noticia anterior
¿Cómo educar en diversidad? Carreras de Técnico en Educación Parvularia y Psicología se unen para ofrecer seminario a comunidades educativas“El ENFONO sirve para motivar a los estudiantes y que sepan que ellos también pueden investigar”
- La docente Lorena Chacana, quien fuera estudiante de la primera generación de Fonoaudiología en UST Viña del Mar, señala que el énfasis en la investigación es uno de los sellos distintivos de la carrera.
Lorena Chacana Véliz pertenece a la primera generación de la carrera de Fonoaudiología en UST Viña del Mar. Cursó el pregrado entre 2010 y 2014 e inmediatamente después inició un magíster que finalizó en 2017 en la misma casa de estudios. Hoy estudia un doctorado en Neurociencias, labor que combina con la docencia en UST. Ha sido testigo del crecimiento de ENFONO, el Encuentro Nacional de Estudiantes de Fonoaudiología que este año celebró su octava edición y no duda en señalarlo como un evento que motiva el interés por la investigación entre los y las estudiantes, que es el verdadero sello de esta carrera en la sede de la Ciudad Jardín.
“Ese sello depende de dos cosas. Una, que se te den las oportunidades, y otra, que tú tengas la motivación para hacerlo. Por ejemplo, cuando yo estudié acá mi tutora de tesis fue la profesora Ana Paula Machado y ella siempre nos incentivó, cuando estábamos preparando la tesis nos avisaba de cursos y cosas así. Siempre nos motivó, con ella publiqué mi primer artículo científico. A veces en pregrado cuesta que se publique, pero con ella las tesis se preparaban para que fueran publicadas”, recuerda.
“Para ella no podía haber un trabajo que no fuera pensado para ser publicado, porque ¿para qué hacer una tesis que no va a quedar en nada? Es importante publicar, más allá de cumplir con una estadística, es mostrar lo que se está haciendo, es una vitrina para las investigaciones”, añade.
¿Encuentros como ENFONO sirven para estimular la investigación? La docente piensa que sí. “Sí, porque escuchan a sus profesores, compañeros y a otros investigadores. A veces uno como estudiante lo puede sentir un poco lejano, entonces venir y ver que lo puedes hacer, que hay un reconocimiento de otras personas, te hace darte cuenta que lo que estás haciendo es importante para la sociedad. En pregrado quizás todavía no son tan conscientes de la importancia de investigar, al menos no en cuarto año, que es donde yo hago clases, pero por ejemplo yo motivé a mis alumnas para que vinieran y participaran. Es como ir pasando la posta: lo que yo aprendí con Ana Paula trato de enseñárselo a las chicas. El ENFONO sirve para motivar a los estudiantes y que sepan que ellos también pueden investigar”, dice.
Primera generación de Fonoaudiología
Lorena recuerda su paso por el pregrado señalando que “las cosas han cambiado mucho, la misma malla curricular ha cambiado. Éramos como conejillos de indias, además no teníamos una generación que nos fuera mostrando el camino, en cambio los que llegaron después nos tenían a nosotros para preguntar cualquier cosa. Pero ser de la primera generación tenía sus ventajas: como éramos tan pocos, éramos muy regalones, teníamos acceso directo para hablar con Gianfranco Arancibia (director de carrera) y Jorge Valdés (jefe de carrera en ese entonces), era casi golpear la puerta y entrar. Eso nos ayudó mucho”.
Por último, revela que, a pesar de su identificación con Fonoaudiología, esta carrera no fue su primera opción al ingresar a la Educación Superior: “Yo quería estudiar Enfermería, pero cuando quise matricularme no había cupos, entonces estaba entre Tecnología Médica y Fonoaudiología para matricularme y después cambiarme en segundo año. Elegí Fonoaudiología porque tenía más ramos en común con Enfermería y en primer año fue como ‘oh, me está gustando esta carrera, es entretenida, interesante’… y después ya no me quise cambiar”.