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Académica de UST Santiago participó en libro sobre FilantropíaEgresada en Técnico en Podología Clínica regresa ahora a Santo Tomás como docente
“A un tío le amputaron sus extremidades inferiores por diabetes. Toda mi familia tiene diabetes y eso me impulsó a estudiar esta carrera, porque no quiero que nadie más pase por esa situación. Esa fue mi motivación”.
Con estas palabras Gloria Angélica Corvalán explica sus motivos para ingresar a estudiar Técnico en Podología Clínica en el año 2013. Hoy, 4 años más tarde, Gloria declara haberse enamorado de la carrera y utiliza ese sentimiento para impulsar a las siguientes generaciones, ya que actualmente se desempeña como docente en Santo Tomás Puente Alto.
“Yo amé mi carrera desde el principio. Aún la amo y creo que nunca, pero nunca, dejaré de amarla”, explica la egresada de Técnico en Podología Clínica Gloria Corvalán.
Estudiar Técnico en Podología
¿Cómo fue ingresar a la carrera Técnico en Podología Clínica?
Los primeros días fueron bastante estresantes, el primer semestre fue horrible, lloré mucho porque después de 20 años había decidido estudiar y el cambio fue grande. Antes fui dueña de casa y volver a estudiar, con 38 años… me costó, pero después del primer semestre empecé a tomarle el ritmo y me adapté.
¿Qué fue lo más difícil de retomar estudios?
Computación. Me costó aprender. Yo sabía algo, pero solita fui aprendiendo más, ahora me manejo. Para matemáticas vine al Centro de Aprendizaje, a las nivelaciones porque me costó retomar, pero con el apoyo de las amigas, compañeras y profesoras, se pudo.
¿Qué fue lo que más disfrutaste siendo alumna?
Lo que más disfruté fueron las salidas a terreno, porque no me imaginaba que se realizaran, que uno iba a ver a personas que ni siquiera conocían la carrera pero una vez que los atendías, les dabas alivio. Eso es lo más reconfortante, ahí creció el amor por la carrera, porque la gratitud que entregan los pacientes es tremenda. Y la Patatón, evento del que solo me he perdido una versión, porque participé como alumna, como egresada y hoy como colaboradora.
¿Cómo llegaste a realizar clases acá?
El Jefe de carrera me llamó para realizar un reemplazo en el CESFAM La Florida y por ahí se gestionó este vínculo para mi integración de apoyo docente. Tuve buen desempeño y eso me sirvió para regresar, pero esta vez desde el otro lado.
¿Qué funciones realizas en la carrera Técnico en Podología Clínica?
Soy docente instructor de los Cesfam Pablo de Rokha y La Florida. Ahí guío a los alumnos del ramo “Procedimientos podológicos avanzados” en segundo año y “Atención podológica en usuarios cardiovasculares” de los alumnos vespertinos de la carrera. Divido el tiempo entre los Cesfam y labores administrativas, de trabajos, notas, asistencia, etc.
¿Cómo fue tu reingreso a Santo Tomás?
Costó un poco, porque es difícil sólo instruir, mis manitos querían trabajar, pero claro ellos tienen que aprender y realizar los procedimientos. Yo los superviso y estoy pendiente, instruyéndolos para que adquieran la práctica.
¿Qué consejo le das a tus alumnos?
Yo siempre le digo a los alumnos que yo salí de aquí, soy egresada de esta institución y sé por lo que están pasando, sé lo que cuesta la carrera y por eso, ellos tienen todo mi apoyo, para que al igual que yo, se enamoren de esta profesión.