Docentes de la UST Talca fueron capacitados en Metodología de Simulación Clínica

Durante dos días, un grupo de docentes de la Facultad de Salud de la Universidad Santo Tomás Talca, se capacitaron en Simulación Clínica con el objetivo de agregar valor a sus asignaturas y tener nuevas herramientas para enseñar a los estudiantes.

Esta jornada de perfeccionamiento incluyó en ambos días una clase expositiva donde los asistentes podían participar de manera activa, y una jornada práctica destinada a aquellos académicos de la Facultad de Salud que realizan talleres utilizando la metodología de la simulación clínica.

Al respecto la Coordinadora del Centro de Simulación Clínica de la Universidad Santo Tomás Talca, enfermera Fabiola Maldonado, explicó que en total participaron alrededor de 25 docentes, quienes en el primer día, desarrollaron el tema de generación de material que consideró generalidades del proceso de elaboración de talleres con evaluación de competencias, características y aplicaciones de escenarios de acuerdo al tipo de fidelidad y recomendaciones para la creación de rúbricas de evaluación de competencias en simulación clínica.

En tanto en el área práctica, los académicos trabajaron en grupos para elaborar talleres fijando estándares de calidad, a lo que se sumó el tema de Debriefing con una parte teórica que consideró estilos, etapas y tipos, para luego ejecutar los talleres utilizando a los académicos en el rol de estudiantes y facilitadores.

“Es necesario tener una articulación coherente entre talleres, plan de clases y programas de asignaturas que contribuyan al desarrollo del perfil de egreso de los estudiantes y la simulación clínica tiene el propósito de permitir un aprendizaje experiencial, en el cual los estudiantes pueden aprender a descubrir y construir conocimiento maximizando sus experiencias con pacientes en un ambiente clínico. Al aprender a través de la experiencia, se debe fijar una instancia de reflexión guiada, denominada Debriefing, que es conducida por un facilitador (académico). Es por lo anterior, que resulta fundamental que los docentes que utilizan la metodología se encuentren en capacitación permanente para mantener un rol activo de facilitador que contribuya a fijar el aprendizaje en los estudiantes”, comentó.

En esta capacitación participaron docentes de las carreras de Nutrición y Dietética, Kinesiología, Fonoaudiología y Enfermería, por cuanto el uso de esta metodología es un importante beneficio para los estudiantes ya que acelera el proceso de aprendizaje y mejora su familiarización con métodos de autoevaluación.

Por su parte, los docentes que esta vez fueron los estudiantes, agradecieron la oportunidad y valoraron especialmente los nuevos conocimientos adquiridos.

“El curso fue súper práctico, bien enfocado y muy atingente a lo que nosotros utilizamos con los alumnos. Fue un curso muy enriquecedor desde el punto de vista profesional, ya que nos corrobora que lo estamos haciendo está bien y obviamente hay cosas que se deben ir mejorando”, indicó Paulo Rubio, docente de Kinesiología.

Similar opinión fue la de la académica de Nutrición y Dietética, Lorena Toledo, quien dijo que “me fui feliz, si lo pudiera evaluar con un 10 le pondría un 100. Son tremendas herramientas para nosotros, sobre todo para los que estamos partiendo. Es fundamental tener herramientas validadas frente a los estudiantes”.

“Para mí fue muy provechoso porque este año es la primera vez que voy a dictar simulación clínica entonces yo iba de cero. El curso desde la parte teórica y la práctica fue enriquecedor, además la disposición y claridad de Fabiola fue excelente. Estoy cien por ciento satisfecha con el curso porque además podemos traspasarlo a los alumnos”, señaló María Francisca Parra, docente de Kinesiología.

Finalmente, la docente de Nutrición y Dietética, Miriam Rojas, relató que fue una experiencia nueva y provechosa al abordar un tema que, en su caso, aún no ha podido poner en práctica con estudiantes.

“Creo que las clases se dictaron de buena forma y después en la práctica fuimos protagonistas. Haber vivido esa experiencia nos permite ponernos en el lugar de los estudiantes después cuando nos toque estar en la labor docente”, concluyó.