Docente de Derecho asumió como Ministro Interino de la Corte de Apelaciones de Rancagua

El docente de la Escuela de Derecho, Álvaro Saavedra, asumió como Ministro Interino de la Corte de Apelaciones de Rancagua, tras ser nombrado por la Presidenta de la República luego de integrar la terna propuesta por la Corte Suprema para ocupar el cargo vacante en el tribunal de alzada.

Álvaro Saavedra se desempeñaba hasta ahora como Juez Titular del Tercer Juzgado de Letras de Talca y es también docente de planta de la Universidad Santo Tomás Talca.

El juramento respectivo, se llevó a cabo el 18 de noviembre en una ceremonia encabezada por el Presidente de la Corte de Apelaciones de Rancagua, ministro Ricardo Pairicán, a la que también asistieron los ministros Emilio Elgueta, Marcelo Vásquez, Michel González, Marcelo Albornoz, además de los fiscales judiciales, Marcela de Orúe y Álvaro Martínez; el secretario, administrador, relatores y funcionarios de la Corte, quienes felicitaron al magistrado y le desearon el mejor de los éxitos en su gestión en el tribunal de alzada.

Al respecto el ministro Emilio Elgueta señaló que Álvaro Saavedra era un gran funcionario con una destacada trayectoria y calidad humana.

“Es un gran funcionario, muy eficiente, un buen trabajador y una maravillosa persona, de manera que le deseo el mayor éxito del mundo, que vuele muy alto, y que siempre contará con mi apoyo y de todos los colegas que hoy lo acompañamos», afirmó.

Por su parte, el Ministro (I) Saavedra dijo que era un gran orgullo recibir este nombramiento, ya que se trata de uno de los más altos niveles al que se puede aspirar en la carrera judicial.

“Uno recibe este tipo de nombramientos con mucha humildad porque son mayores responsabilidades. El tiempo que esto dure seguiré cumpliendo con mis labores en la Escuela de forma normal también”, comentó.

Sumando a la importancia que tiene para su carrera profesional, el docente aseguró que esta experiencia será beneficiosa para sus alumnos que tendrán la oportunidad de tener una mirada mucho más amplia de lo que es el derecho.

“Ellos podrán aprender cómo se ejerce la profesión y conocer cómo piensan los jueces también. Eso les amplía la visión más allá de la del abogado litigante, entonces el alumno se va retroalimentando con las distintas visiones de los docentes sobre determinados temas. Eso también les puede ayudar a definirse por su futuro profesional”, concluyó.