Docente del Área Odontología de sede Viña del Mar advierte sobre las enfermedades “ocultas”: gingivitis y periodontitis

  • Alejandra Bravo señala que la comunidad debe aprender a reconocer los síntomas de alerta en las enfermedades que afectan a las encías. La periodontitis puede causar pérdida de dientes si no hay un tratamiento adecuado.

Cuando se habla de salud bucal, generalmente se piensa en caries como la única enfermedad que nos debería preocupar. Sin embargo, la gingivitis y la periodontitis son igualmente peligrosas ya que también pueden provocar pérdidas dentarias. Y un gran problema es que, como no son muy conocidas, son pocas las personas que saben identificar sus síntomas y consultan a un especialista. Alejandra Bravo, cirujana dentista y docente del Área de Odontología del CFT Santo Tomás Viña del Mar, explica los detalles de estos problemas que afectan a los tejidos que rodean y sostienen al diente.

“La población en general está muy consciente sobre las caries, pero sobre las enfermedades que afectan a la encía no se habla mucho. En Chile tenemos una población desdentada altísima. Las razones son múltiples, pero principalmente se debe a periodontitis, que es la enfermedad que afecta a los tejidos que soportan al diente. Cuando esta enfermedad avanza sin tratamiento y prevención, los dientes se pierden. Hay que recordar que los dientes no se pierden por la edad, ni por estar embarazada, ni por tener un hijo, esos son mitos. Es el biofilm, que es la placa bacteriana acumulada en los dientes, lo que genera que se inflamen las encías, eso genera gingivitis. Si se mantiene en el tiempo, pasa a periodontitis, que ya sería reabsorción de huesos”, explica.

 Señales de alerta

Según señala, para evitar problemas mayores es fundamental la prevención, ya que la gingivitis es una enfermedad reversible, no así la periodontitis, que como enfermedad crónica sólo puede tratarse con controles permanentes. ¿Cómo reconocer la gingivitis? Es una inflamación de la encía que puede manifestarse también con un cambio en la coloración de la encía y sangrado al momento del cepillado.

Una dificultad que presentan estas enfermedades es que no necesariamente son dolorosas, por lo que pueden pasar desapercibidas. De hecho, hay personas que acuden al odontólogo por caries o incluso porque quieren iniciar un blanqueamiento o ponerse carillas, y en ese momento se descubre que la encía está inflamada y que hay otra enfermedad distinta al motivo de consulta. “La gente llega a la consulta cuando tiene dolor, pero la gingivitis no es dolorosa, entonces hay que aprender a reconocer sus síntomas”, sostiene Alejandra Bravo.

El sangrado puede ser el síntoma más evidente, ante el cual muchas personas reaccionan haciendo precisamente lo que no deberían hacer: dejan de lavarse los dientes. “Eso pasa mucho y es por falta de información. ¿Qué deberían hacer? Primero, ir al odontólogo para obtener un diagnóstico y tratamiento. Otra recomendación es que nunca hay que dejar de lavarse los dientes ni de utilizar los elementos de higiene, que son la seda dental o el cepillo interproximal”, señala la docente de Santo Tomás Viña del Mar.

Lo mismo ocurre cuando las personan notan que tienen un diente suelto, pero Alejandra Bravo advierte que la recomendación es “seguir higienizándolo, cepillándolo y usando seda dental, Pero sí o sí se debe acudir al odontólogo, porque un diente no se va a mejorar por sí solo”.

Y aquí aparece otro punto a considerar: mucha gente piensa que el cepillado de dientes ya es suficiente para mantener una correcta salud bucal. “Los pacientes creen que la seda dental o el cepillo interproximal son opcionales, pero son muy necesarios ya que el cepillado abarca un 60 o 70 por ciento de eliminación del biofilm dental. Entonces los otros elementos de higiene son indispensables para llegar a un porcentaje mayor”, explica.