Estudiantes de Técnico Agrícola reciben chaqueta de terreno en acto simbólico

Con la mirada puesta en una agricultura moderna, sostenible y basada en datos, los estudiantes de primer año de la carrera de Técnico Agrícola de Santo Tomás Chillán recibieron la tradicional chaqueta de terreno, símbolo de identidad profesional y compromiso con una formación orientada a los desafíos actuales del sector.

La ceremonia fue encabezada por Macarena Palma Sotomayor, directora del área de Recursos Naturales, quien subrayó la relevancia del hito en la vida académica de los estudiantes. “Más allá de una prenda, esta chaqueta representa pertenencia, responsabilidad y compromiso con el uso racional de los recursos en la producción de alimentos”, destacó, agradeciendo también el acompañamiento de las familias presentes.

Uno de los momentos centrales de la jornada fue la clase magistral “Agricultura 4.0”, dictada por Marcelino Claret Merino, investigador de INIA- Quilamapu y referente nacional e internacional en agricultura de precisión e inteligencia artificial. En su exposición, abordó los cambios tecnológicos que enfrenta el rubro agrícola, así como el rol crucial de los técnicos del futuro. “Los estudiantes no solo se preparan para un empleo, sino para construir una mejor sociedad”, señaló el también divulgador científico.

Durante la ceremonia Eduardo Ramírez, estudiante de segundo año, motivó a sus compañeros a asumir con responsabilidad los años venideros: “Invito a mis compañeros a esforzarse, a sacar adelante la carrera y a dejar en alto el nombre de Santo Tomás”.

La actividad destacó por el fuerte protagonismo estudiantil. Alumnos de segundo año lideraron la ceremonia en múltiples roles: actuaron como maestros de ceremonia, ofrecieron discursos de bienvenida y realizaron personalmente la entrega de chaquetas a sus compañeros. Esta participación fortaleció el sentido de comunidad, la colaboración intergeneracional y la identidad de la carrera.

En el mismo acto se hizo entrega de certificados a los estudiantes de primer año que participaron en la jornada de inducción en terreno, realizada en el Centro de Educación y Tecnología (CET) de Yumbel. Allí, los alumnos fueron parte de un taller práctico de agroecología, marcando así el inicio de su formación técnica con una experiencia concreta, vinculada al territorio y al desarrollo sostenible