El nuevo horizonte del cobre: Descubrimiento en China y sus repercusiones globales para la minería
El reciente descubrimiento de más de 20 millones de toneladas de cobre en el altiplano tibetano por parte de China marca un hito significativo en la industria minera global y plantea diversos desafíos y oportunidades para países productores como Chile.
Este hallazgo se centra en cuatro grandes yacimientos: Yulong, Duolong, Julong-Jiama y Xiongcun-Zhuno, ubicados en la meseta Qinghai-Tíbet. Expertos estiman que el potencial total de cobre en la región podría alcanzar los 150 millones de toneladas, posicionando al altiplano tibetano como un futuro centro mundial de recursos de cobre.
China, que en 2023 importó aproximadamente 6 millones de toneladas de cobre refinado, representando cerca del 60% del consumo global, busca con este descubrimiento reducir su dependencia de las importaciones. Esta estrategia podría reconfigurar las dinámicas comerciales con países exportadores como Chile, Perú y Australia.
Para Chile, el principal productor mundial de cobre con una producción de 5,4 millones de toneladas en 2024, este escenario presenta varios retos. La Comisión Chilena del Cobre (Cochilco) ha mantenido su proyección del precio promedio del cobre para 2025 en US$ 4,25 por libra, anticipando un superávit marginal en el mercado del cobre refinado.
Sin embargo, la entrada de China como un productor significativo podría ejercer presión a la baja sobre los precios internacionales del metal, afectando los ingresos por exportaciones de Chile, donde el cobre representa más del 50% del total exportado.
A nivel global, el descubrimiento en China podría incentivar movimientos de consolidación en el sector minero. Recientemente, las conversaciones de fusión entre Glencore y Rio Tinto, que de haberse concretado habrían formado una empresa valuada en US$ 160.000 millones, reflejan el interés por fortalecer posiciones en un mercado donde el cobre es esencial para la transición energética.
No obstante, la expansión de la minería en regiones sensibles como el altiplano tibetano plantea preocupaciones ambientales y sociales. Esta área, conocida como el «Tercer Polo», es fuente de importantes ríos asiáticos que abastecen a millones de personas. China ha aprobado leyes para la protección medioambiental de esta meseta, limitando ciertas actividades de construcción y minería.
En Chile, la actividad minera también ha generado preocupaciones de salud pública. En Calama, médicos han reportado un aumento en diagnósticos de autismo infantil severo y otros problemas de salud, posiblemente vinculados a la contaminación minera.
En conclusión, el descubrimiento de vastas reservas de cobre en China tiene el potencial de transformar el mercado global del metal rojo. Para Chile, este nuevo contexto subraya la importancia de diversificar su economía, invertir en tecnologías más limpias y fortalecer las regulaciones ambientales, asegurando así su competitividad y sostenibilidad en el largo plazo.
- Publicado originalmente en Diario Estrategia el sábado 18 de enero de 2025.