Cómo preparar el paso de la educación secundaria a la superior
El paso hacia la educación superior es un gran hito dentro de la vida de cada persona, sin lugar a dudas es un periodo de formación que marcará nuestras vidas para siempre, ya que lo que se decide estudiar muy probablemente será nuestra actividad a lo largo de la vida.
Por otro lado, la experiencia de ser estudiante en educación superior marca fuertemente tanto a nivel personal como a nivel profesional, pues en esta etapa se desarrollan y ven reflejados aspectos de mucha importancia tales como las habilidades de empleabilidad y las competencias de la disciplina de estudio.
¿Cómo podemos prepararnos para este cambio?
Existen varios consejos que pueden ayudar en este camino de mayor autonomía, donde cada estudiante debe hacerse responsable de su proceso formativo, de su enriquecimiento y de su aprendizaje durante la duración de su carrera.
La primera encuesta Nacional de Salud Mental Universitaria, realizada el año 2019, da cuenta que un 54% de los estudiantes ha sufrido de estrés y un 46% de muestras de ansiedad durante su paso por la educación superior. Con este indicador se hace realmente necesario cuidar de la salud mental de los estudiantes que ingresan a este gran desafío. Algunas de las recomendaciones que se sugieren son: Planificar el día; los momentos de clase, de estudio, de compartir con la familia y otras actividades con amigos. Si no se tiene la costumbre de planificar es bueno utilizar un planner semanal o mensual para organizar los tiempos.
Dejar un tiempo diario, por mínimo que sea, para repasar alguna materia. Igualmente, para aquellas que necesitan de mayor apropiación es bueno dejar post-it o pegatinas con ideas fuerza de la temática de estudio en los lugares de la casa donde se pasa más tiempo.
Poner atención en la clase, aprovechar el tiempo para tomar apuntes propios, hacer consultas y participar en actividades con grupos de trabajo.
Otro punto muy importante es respetar las horas de sueño (idealmente 8 hrs.), ya que el cerebro utiliza este tiempo para afianzar nuevos conocimientos y experiencias vividas durante el día.
No abandonar las actividades sociales con amigos y familias. Es muy importante mantener esta rutina para mantener el equilibrio emocional a pesar de las altas exigencias que se viven en algunos periodos del semestre.
Mantener una alimentación saludable y equilibrada, respetando siempre los horarios de comida. El cerebro como buena “maquina” requiere de nutrientes adecuados para funcionar bien.
Todas estas medidas ayudarán a que la transición a la educación superior sea más llevadera y se proyecte de manera exitosa para los años venideros.