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“Senior Tech”: Los adultos mayores también usan la tecnologíaDeportista tomasino
Entrevista| Juan Carlos Garrido medalla de oro en panamericano paralímpico y estudiante de Preparador Físico
El deportista paralímpico Juan Carlos Garrido, de la carrera de Preparador Físico, logró una buena actuación al quedarse con el oro en su categoría, compitiendo en la disciplina powerlifting en el panamericano realizado en el estado de Louis, Estados Unidos.
Acompañado por su equipo y compañeros, viajó hasta Norteamérica desde el 8 al 11 de julio y volvió con un gran triunfo en la categoría de menos 59 kilos, prueba de peso corporal. Además, fue parte del tercer puesto del ranking total del panamericano. Conversamos con el deportista y tomasino, para saber con más detalle su paso por la competición.
- ¿Cómo fue el proceso de obtener el oro?
“Tenía claro que iba a ser un panamericano duro, porque estaba mi competencia directa de América con el salvadoreño con el que me encontré en los juegos paralímpicos de Tokio. Entonces mi meta era quedarme con el primer lugar, el salvadoreño partió ganando con 182, y yo hice 180 en el primer intento, en el segundo fallamos los dos, y en el tercero subí a 185 kilos logrando levantar el peso, y él fallo con 184, quedándome con el oro”.
- ¿Cuáles son las categorías en las que participas?
“Mi categoría es en menos 59 kilos de peso corporal, muy parecida a la del judo y el boxeo. Y en la otra prueba que también obtuve oro fue en la competencia por equipo donde vamos tres deportistas del mismo país y competimos contra los demás países. En esta disciplina nosotros ya el año pasado logramos ser campeones mundiales, y bueno la formula cambió un poco ahora y estuvo mucho más dura la competencia”.
- ¿Cómo te sentiste durante la competición? ¿Pensaste en ir por el primer lugar desde un principio?
Puede sonar muy soberbio esto, pero yo nunca voy a competir para quedarme con el tercer o cuarto lugar, siempre voy por el oro. Ahora, que eso se pueda dar siempre es difícil, hay veces que uno va con todo y las cosas no se dan. No estuve entrenando muy bien los primeros días que llegué a Estados Unidos, de hecho, vinimos sin entrenador, porque sufrió un problema de salud, entonces también me tocó asumir la responsabilidad de echarme al hombro al equipo y empezamos con los demás deportistas a hacer el papel de entrenador, dirigir sus competencias. Entonces, llevaba más peso a comparación de otras competencias, pero, llegó el día de competir y sabía que había que ganar y que los dolores debían irse”.
- ¿Contaste con el apoyo necesario para ir a esta competición?
Conté con el apoyo de siempre, del Comité Paralímpico, del Instituto Nacional de Deportes de Chile, y en esta ocasión debido a que estoy cursando mi tercer semestre de Preparador Físico en Santo Tomás, tuve mucho apoyo de parte de mis profesores. De hecho, yo cerré todos mis ramos antes de competir, porque no iba a tener cabeza para estar pendiente de cumplir en los estudios y estar en el panamericano, entonces tuve que acelerar un poco en mis trabajos, y gracias a Dios no tuve que dar ningún examen, y bueno destacar el apoyo constante de la institución para permitirme estudiar y rendir en lo que me dedico”.
- ¿Qué es lo difícil de estudiar y entrenar?
“Es bastante complejo, no solamente entreno y estudio, sino que también soy papá, pero, he recibido el apoyo que necesito. He tenido que exigirle más a la cabeza para estudiar, muchas veces trasnochar para terminar con los trabajos a tiempo, para que al momento de entrenar enfocarme solamente en eso y darle con todo, no podía descuidarme en ninguno de los dos porque de carrera me queda muy poco y el panamericano es aparte de mí, es mi trabajo, yo vivo de esto. Entonces no puedo restarle importancia a ninguna de las dos responsabilidades”.
- ¿Cuál es tu rutina de entrenamiento?
Entreno de lunes a sábado, dos veces al día, en la mañana y en la tarde, hasta las 17:30 donde ya tengo que cortar para luego irme a las clases. Esto lo realizo todos los días, y la verdad es que llevo un año aproximadamente en que ya no vivo en la residencia deportiva en donde estuve 11 años, hoy vivo con mi hija y mi papá en la casa. Así que, había que considerar trayectos, muchas cosas en donde yo solamente estaba enfocado en estudiar y entrenar, ahora ha cambiado por mi hija, pero, la verdad es que ha sido gratificante”.
- ¿Qué se siente representar a tu país?
“Cuando estás compitiendo, hay un nivel de estrés tremendo, pero cuando llega el momento que te dicen que ganaste un oro y que te toca entonar tu himno patriótico, te das cuenta que todo valió la pena. Desde que supe qué es el deporte, soñaba algún día cantar el himno nacional fuera del país, y poder hacerlo con una muy buena marca, compitiendo con los mejores. Este panamericano no fue de bajo nivel, sino que muy alto, entonces es satisfactorio poder darle una alegría a mi hija, familia que me estaban viendo, y me mandaban vídeos después celebrar y sufrir por el levantamiento”.
- ¿Qué fue lo primero que pasó por tu cabeza cuando supiste que ganaste?
“A la primera persona que tuve presente fue a mi hija, dedicarle el triunfo a ella, a mi madre que no está conmigo, a mi padre. También, sentir que todo el esfuerzo que se realizó durante estos meses valió la pena, fue gratificante. Se me vinieron dos cosas a la cabeza, el día antes me habían dado una muy buena noticia, que había aprobado todos mis ramos sin rendir ningún examen, y al otro día salí a competir por el oro con un rival muy fuerte, y también tenía eso en la cabeza”.
- ¿Cuál son los logros más grandes que has vivió?
“Pueden ser dos, la primera, cuando volví al deporte el 2011 muchas personas me dijeron que ya estaba viejo, que no podría seguir que estaba gordo, y finalmente se me dio la oportunidad, dejé todo me vine a Santiago y estuve en un panamericano donde nadie daba un peso por mí, me quedé con el bronce, y desde ahí para mí ya fue un cambio radical. Empezaron a pagarme la beca proddar, que al final es como un sueldo. La otra es que el 2019 en Kazajistán conseguí mi primera medalla mundial, un bronce en la categoría 59 kilos y el 2021 lo volví a conseguir. Me falta la paralímpica que se me ha arrancado”.
- ¿Cuáles son tus próximas proyecciones?
“Este año no hay muchas competencias. Hay otro que aún no se sabe si es en Portugal, que son mundiales, o va a ser un Open en Dubai, los cuáles están por confirmarse. Si tengo algún límite sería cuando yo sienta que no puedo dar más en lo físico para seguir rindiendo, porque a mi me gusta participar y competir. En este momento no tengo ni pensado retirarme. Aparte quiero participar de Santiago 2023 en mi país, después obteniendo una clasificación para los juegos paralímpicos, obviamente que voy a estar ahí”.