Santo Tomás Los Ángeles participa en estudio para predecir riesgo de accidentes en choferes profesionales

A través de herramientas clínicas, investigadores de la región del Biobío asocian el diagnóstico de Amnea Obstructiva del Sueño a potenciales peligros en la conducción.

Según datos de la Comisión Nacional de Seguridad de Tránsito (Conaset), en el 2020 registraron cerca de mil 500 fallecidos en accidentes vehiculares. De este total, 37 personas perdieron la vida en colisiones causadas por el cansancio, fatiga o hipersomnolencia del conductor, factores que están asociados a la ocurrencia del Síndrome de Apnea Obstructiva del Sueño (AOS).

“Validación de una herramienta de tamizaje del Síndrome de Apnea Obstructiva de sueño moderado y severo en conductores comerciales”, es el proyecto desarrollado por un equipo de investigadores del Departamento de Bioquímica Clínica e Inmunología de la Facultad de Farmacia de la Universidad de Concepción. El objetivo es validar herramientas clínicas para predecir el riesgo de accidentes asociado al diagnóstico de AOS en conductores profesionales.

Sin embargo, la poca disponibilidad de estudios de sueño mediante polisomnografía, sumado al alto costo del examen, hacen que esta patología se encuentre subdiagnosticada aseguran los académicos.

El Dr. Gonzalo Labarca, líder del estudio, detalló que:  “se trata de un trastorno bastante prevalente que está muy asociado a otras enfermedades crónicas, como obesidad, hipertensión, diabetes y afecta, mayormente, a hombres jóvenes”.

Respecto al segmento al que se orienta la investigación, comentó: “una de las asociaciones que se hace es que el perfil de los conductores profesionales tiene estas mismas características y si a eso se le suma  la dinámica propia de su trabajo, con un mal dormir causado por un  trastorno respiratorio del sueño, puede llevar a mayor riesgo de accidente de tráfico y otras complicaciones».

El proyecto propone “caracterizar a un determinado número de pacientes a través de diversos exámenes, entre los que está la polisomnografía. Con ello buscamos establecer la Gold estándar para determinar trastornos del sueño”, explicó Mario Henríquez, kinesiólogo de la Universidad Santo Tomás Los Ángeles y director alterno de la iniciativa.

Henríquez agregó que “la información que se obtenga a través de esta herramienta, junto con otras variables, permitirá determinar qué riesgo de accidentabilidad podría tener este paciente, tomando en cuenta que las personas con trastornos respiratorios del sueño generan somnolencia o hiper somnolencia diurna”.

La iniciativa, en la que participan también los investigadores Carlos Zúñiga, Gabriela Nazar y Estefanía Nova, contempla una muestra de 80 conductores profesionales, tanto de transporte de pasajeros, como de otras áreas comerciales. Los primeros resultados se proyectan para fines de 2022.

VISITA MUTUAL

Los accidentes de tránsito son, según la Organización Mundial de la Salud (OMS), un problema prioritario de salud pública en todo el mundo.  Cada año mueren cerca de 1,3 millones de personas en las carreteras y entre 20 y 50 millones padecen traumatismos no mortales.

Ello, sumado al rápido aumento del parque vehicular, hace sea una tarea urgente encontrar nuevas y mejores estrategias que permitan prevenir los accidentes de tránsito.

Por esta razón la Superintendencia de Seguridad lanza cada año el fondo de Proyectos de investigación e innovación en prevención de accidentes y enfermedades profesionales, concurso financiado por las Mutualidades de Empleadores y por el Instituto de Seguridad Laboral.

Este año, la convocatoria entregó $1.178.327.014 destinados a 33 proyectos, uno de los cuales es el estudio liderado por el Dr. Gonzalo Labarca.

Tras la adjudicación de la iniciativa, Héctor Jaramillo Gerente Corporativo de Seguridad y Salud en el Trabajo de la Mutual de Seguridad,  visitó el Centro de Vida Saludable de la Universidad de Concepción, donde se ejecutará el proyecto, para conocer las dependencias donde se implementará la iniciativa.

“La fatiga es uno de los elementos que están asociados a accidentes de tránsito y sobre todo en aquellos trabajadores que tienen que conducir vehículos o buses que transportan personas o materiales durante largas distancias.  Hemos visto que las personas con AOS o que duermen mal todos los días por distintas condiciones, tienen mayores posibilidades de tener estos accidentes», señaló Jaramillo.

Los investigadores coinciden en que el impacto que tiene la AOS va más allá del ámbito de la somnolencia. Argumentan que las personas con esta enfermedad tienen otras patologías asociadas, como obesidad o problemas metabólicos.