Cómo realizar una videoclase participativa
Las clases remotas o a distancia -hoy implementadas debido a la crisis sanitaria- debieran estar permeadas de todo el soporte pedagógico necesario para que el contenido disciplinar se presente a través de un conjunto variado de estrategias didácticas basadas en metáforas, ejemplos, demostraciones, analogías etc. No basta saber que la clase se estructura en inicio, desarrollo y cierre, es indispensable modelar esa estructura para exponer el objetivo de aprendizaje, detectar conocimientos previos y motivar frente a los temas a trabajar (anclaje); es necesario presentar la información fluida, clara, ojalá en forma interactiva y dinámica (apropiación del nuevo conocimiento); es indispensable ceder el control y otorgar espacios para el protagonismo de los estudiantes donde puedan aplicar, debatir, enfrentar un dilema o también cometer errores (movilización del saber); es prioritario culminar la sesión reflexionando respecto de lo aprendido, exponiendo certezas y dudas, sistematizando y conectando lo tratado con la próxima sesión (cierre metacognitivo).
Lo expresado en el párrafo precedente, sólo es posible en la medida en que se logre la participación de los estudiantes, ello teniendo en cuenta que el aprendizaje es activo y el involucramiento es esencial para la construcción del saber.
La participación genera comunidades de aprendizaje, permite la comunicación intersubjetiva y es la instancia ideal para generar preguntas, encauzar dudas o compartir experiencias. Entonces la gran pregunta es ¿qué herramientas pedagógicas permiten la participación activa de los estudiantes en las clases on line?
Soslayando el afán de brindar recetas, me permito sugerir siete herramientas pedagógicas, probadas y vivenciadas desde lo experiencial: Matriz SQA ideal para la detección de conocimientos previos y reflexión final a través de un cuadro de tres columnas asociado a Qué sé; qué quiero saber y qué aprendí; Fotolenguaje técnica que utiliza imágenes/fotografías y que posibilita indagar en los esquemas mentales y representaciones que poseen los alumnos al momento de abordar un contenido; Plantilla de Inferencias, estrategia para encontrar respuestas a partir de pistas o claves dadas por una pregunta, texto breve, imagen o relato. En un cuadro ad hoc los alumnos exponen sus pensamientos; Video loom, herramienta para crear videos tutoriales y compartirlos de manera instantánea o asincrónica; Pájaro solucionador de problemas, ordenador gráfico apropiado para el desarrollo de la clase en que los estudiantes son desafiados a profundizar en un problema, estableciendo causas y consensuando las mejores soluciones y Seis sombreros para pensar, estrategia que refiere a las diferentes formas en que se estructura el pensamiento de las personas al interactuar en grupo, ya sea desde la cognición, pensamiento crítico, emoción, organización entre otras; técnica muy apropiada para la fase de movilización del saber y para el cierre metacognitivo.
En la interacción profesor- alumno, en ese espacio relacional denominado clase debieran, a mi parecer, emerger permanentemente palabras claves como diálogo, sorpresa, creatividad, motivación, de modo que lo estrictamente cognitivo se complemente con lo procedimental, emocional, social y axiológico. Aquello depende de nosotros – los docentes – y de la forma en que demos cabida a la participación de los estudiantes.