Educación E-Learning: barreras que hacen más duro el desafío de hacer clases on line

Antes de exponer mi opinión respecto del gran desafío que ha sido para los docentes comprender la modalidad E-learning, quiero referirme a la educación a distancia, la cual se posiciona cada día con más fuerzas en nuestros modelos educativos. Esto principalmente por los cambios que se han originado en nuestras formas de vivir, una generación sumergida en la competitividad y no podemos dejar de mencionar la evolución de la tecnología y el surgimiento de los software de apoyos académicos.

Las instituciones de educación y aquellas que se dedican a la educación a distancia, generalmente ocupan algún software libre donde los profesores utilizan los contenidos para elaborar sus clases, y los alumnos que acceden a la herramienta para desarrollar sus tareas o completar sus conocimientos deben ser capacitados para conocer dichos softwares, Sin embargo, pese a que gran parte de estas generaciones tiene amplias competencias computacionales, no logran aprovechar todos los recursos de las plataformas, por el contrario, mientras menos las ocupen mejor, como si les fuera a hacer algo.

Según una investigación colaborativa sobre Learning Management System (LMS), en el año 2013 se contabilizaban 19 plataformas de trabajo, sin embargo cada una de ellas es diferente y debe aprender a ocuparse.

Docentes E-learning
El profesor e-learning se encuentra ante un particular desafío, ya sea como profesor presencial que utiliza las TICs en clase, o como e-learning, e-tutor, e-formador o b-learning, ya que debe conocer algunas de las plataformas o tener las capacitaciones correspondientes para el uso de ellas. Sin embargo nos encontramos ante una realidad no tan satisfactoria: los docentes han mostrado una fuerte debilidad o incompetencias con respecto a este tema y básicamente podemos resumir las barreras que ha encontrado el profesor E-learning en lo siguiente:

1. Que a los profesores aún les cuesta cambiar la manera de pensar. Nacieron en la generación del migrante digital.
2. Tienen una alta resistencia a ocupar cualquier plataforma que esté fuera de lo que conocen. Miedo a lo desconocido o poco tradicional.
3. Consideran que las plataformas tienen problemas constantemente y se caen. No confían en estas tecnologías.
4. El 80% de los docentes en de la Educación Superior trabaja a honorarios, por lo tanto el tiempo de interacción con las plataformas es mínimo.
5. 5.Para un docente es difícil hacer un cambio de paradigma, más aun con plataformas que no funcionan al 100% y con tecnologías que se implementan lentamente en las aulas.
6. Motivar a los profesores a usar tecnologías nuevas es un proceso y toma tiempo, muchas veces falta motivación y siempre falta tiempo.
7. Finalmente el problema del docente E-learning es el desconocimiento que tiene de la plataforma que está utilizando, lo que lo lleva a usarla lo menos posible mientras el sistema se lo permita.

En conclusión, puedo decir que aunque los docentes tengan la vocación y competencias necesarias para realizar clases e-learning y exista una plataforma trabajando al 100%, también hay una gran responsabilidad de la institución en realizar una inducción profunda sobre el funcionamiento de estas plataformas, además de entregar herramientas y apoyo constante en el proceso de familiarización con estas aulas, considerando las barreras expuestas anteriormente. Difícilmente nuestros profesores podrán entregar sus conocimientos y experiencias a nuestros alumnos si ni ellos mismos pueden hacer buen uso de las aulas virtuales. El llamado es a comprometernos y dedicar más tiempo a enseñarles el buen uso de estas plataformas para que la vean como un amigo de su labor, no como un enemigo.