Prekinder: ¿Cómo afrontar el proceso de admisión a la educación pre-escolar?
Iniciamos el mes de Junio y con él muchos padres y apoderados comenzarán la búsqueda de colegios para los más pequeños del hogar. En este mes muchos colegios y jardines infantiles inician el proceso de postulación y admisión para el próximo año, pero ¿a qué se enfrentarán los niños?, ¿Cómo debemos prepararlos para que ingresen a la educación pre-escolar?
Sin duda esta es una instancia que preocupa a padres y apoderados, quienes ven una alta demanda y escasos cupos en los jardines o colegios de su interés. Frente a este escenario es importante recordar que como padres no debemos traspasar nuestra preocupación y expectativas a nuestros niños y niñas, ya que queremos evitar generar en ellos ansiedad, miedo y frustración, al contrario, debemos transformar esta instancia de evaluación en algo positivo, manifestando que se tratará de una jornada de juegos, lúdica y recreativa.
Por lo general, la actividad que se realiza en el proceso de admisión está a cargo de educadoras de párvulo, quienes intentarán medir la madurez del pequeño, su lenguaje y pensamiento lógico.
¿Qué medirán?
- Lenguaje expresivo y comprensivo; expresivo, a través de la pronunciación de palabras y oraciones simples, comprensivo a través de instrucciones y mensajes orales, dados por la educadora. Lo que se busca es observar o descartar un trastorno específico del lenguaje.
- Madurez, y la capacidad de integrarse a un grupo de coetáneos, interactuando con ellos mediante observaciones directa de grupos.
- Motricidad, especialmente fina, en el control y manejo de objetos. Que el niño pueda tomar un lápiz, utilizar tijeras, abotonar un chaleco, etcétera.
- Orientación tiempo-espacio, relacionado a la hora, día, semana o mes en que se encuentren, y la ubicación de su cuerpo, en relación con el de otras personas u objetos.
- Pensamiento lógico matemático, donde le pedirán, por ejemplo, que ordene secuencias o series según forma, tamaño o color, y que clasifique objetos, sonidos, olores u otros elementos, considerando las características que éstos tienen en común.
Finalmente, es importante destacar que en ocasiones, el colegio que queremos para nuestro pequeño, no necesariamente es el adecuado para él, por lo que al momento de elegir el centro educacional, debemos considerar, respetar y valorar las características individuales de los niños.