Terapias complementarias para superar el estrés
Las preocupaciones del día a día y el ritmo vertiginoso de la rutina muchas veces generan estrés y agobio en las personas. Ante esta situación, los métodos holísticos, como las terapias complementarias, se convierten en una gran fuente de ayuda para mantener un equilibro mental.
Una de ellas es la respiración consciente, un método en el que se ejercita la concentración a través de la respiración, bajando los niveles de ansiedad y favoreciendo la capacidad de digerir y asimilar alimentos, eliminar toxinas y mejorar nuestro desempeño.
Para respirar conscientemente se puede hacer un ejercicio simple: sentarse, cerrar los ojos cerrados, tapar la fosa nasal izquierda e inhalar despacio, retener y exhalar. Al terminar este ejercicio, tapar la fosa nasal derecha y repetir.
Otras terapias complementarias que se pueden practicarse en casa debido a su fácil uso son la musicoterapia y aromaterapia, ya que no requieren mayor cantidad de utensilios y preparación.
Aromas que sanan
Para la aromaterapia se pueden utilizar aceites esenciales, frotándose las manos o con infusores ambientales, velas aromáticas o incluso inciensos. Estos aromas permiten que las moléculas vayan directamente al sistema nervioso, produciendo un efecto inmediato de relajación, antiestrés, aliviando las cargas del día a día. Algunos aromas recomendados son:
- Lavanda: actúa como calmante, relajante y sedante, siendo muy eficaz para conciliar el sueño.
- Manzanilla: Ideal para conciliar el sueño. También es útil para personas hipertensas a quienes les cuesta trabajo relajarse. Es muy eficaz con los niños que no se duermen por miedo o que se despiertan con pesadillas.
- Romero: Ayuda a reducir la tensión nerviosa, el estrés y la fatiga, es excelente para los resfriado porque ayuda a la congestión nasal.
- Hierbabuena: Su aroma es vigorizante para que todos los sentidos se activen y promuevan la energía, también es un refrescante, estimulante y calmante.
Terapia a través de la música
La musicoterapia se puede utilizar sola o en conjunto con la aromaterapia. Consiste en el uso de distintos sonidos, ritmos, armonías y melodías que producen efectos beneficiosos en el sistema sensorial, cognitivo y motor, estimulando la creatividad, lenguaje, aprendizaje y memoria.
Para disminuir el estrés y la ansiedad se recomiendan los sonidos de la naturaleza como lluvia, mar, pájaros, viento y música instrumental sin letra, entre ellos, cuencos, flautas nativas y tambor chamánico. Mientra se escuchan los sonidos es esencial dejar la mente en blanco y recostarse entre 15 a 20 minutos, aproximadamente.
La respiración consciente, aromaterapia y musicoterapia, pueden ser utilizados en niños y adultos, ya que no tienen ninguna contraindicación. La única precaución que se debe tener es dejar las aceites, inciensos e infusores fuera del alcance de los niños para evitar accidentes.
Asimismo, pueden ser indicadas y replicadas por profesionales como los Técnicos en Enfermería mención Terapias Complementarias, quienes además realizan un diagnóstico y tratamiento, que podría incluir otras terapias como la reflexología o la auriculoterapia.
La invitación es a cuidarse, a realizar pausas y alimentarse bien para contar con la energía necesaria para vivir nuestro día a día de una manera más armoniosa.