Estudiantes de Preparador Físico conocieron los alcances del ejercicio físico en tratamiento del cáncer de mamas

Una charla sobre la importancia de la prescripción del ejercicio físico en el tratamiento del cáncer de mamas, dictó una experta brasileña para los alumnos de la carrera de Preparador Físico del Centro de Formación Técnica Santo Tomás Talca.

Se trató de la Doctora en Fisioterapia de la Universidad Federal de Sao Carlos, Ivana Leao, quien además es magíster y kinesióloga, desempeñándose actualmente como académica de una importante casa de estudios superiores de la Región del Maule.

¿Cuál es la incidencia del cáncer de mamas en Chile y en la Región del Maule?

“Según la evidencia un 36,3% de toda la población femenina en el mundo puede tener diagnóstico de cáncer de mama en los próximos 5 años, mientras que en Chile un 30,7%. Respecto a la mortalidad en Chile, existe un porcentaje del 12,1% según los últimos estudios realizados (GLOBOCAN 2012: Estimated cáncer incidence, mortality and prevalence worldwide in 2012. International agency for research on cáncer). En el año 2010, cerca de 13,2% de las mujeres murrierón debido al cáncer de mama en la región del Maule (Roco et al 2013)”.

¿Cuáles son las principales complicaciones en el tratamiento del cáncer de mamas?

“El tratamiento del cáncer de mama involucra la cirugía, la quimioterapia, la radioterapia y la terapia hormonal. Es importante considerar que cada uno de esos tratamientos va a generar efectos secundarios. Debido a la cirugía, las mujeres pueden presentar restricción en el rango de movimiento y debilidad de fuerza muscular en el brazo, dolor y linfedema (una condición de edema en la extremidad del brazo). La quimioterapia presenta alteraciones sistémicas e involucra la fatiga, la debilidad, el cansancio, las alteraciones de sensibilidad y enfermedad cardíaca. La radioterapia presenta efectos al nivel de restricción del tejido blando, disminución del rango de movimiento del hombro, alteraciones sensitivas, enfermedad cardíaca y hasta quemaduras. La terapia hormonal presenta efectos en el sistema hormonal y sexual. La quimioterapia presenta duración de 6 meses, la radioterapia aproximadamente 1 mes y la terapia hormonal 5 años. Así que en todas las etapas del tratamiento del cáncer hay alteraciones importantes que pueden ser disminuidas con la actividad física”.

¿Cuáles es la importancia del ejercicio físico durante el tratamiento de este tipo de cáncer?

“La práctica del ejercicio físico es muy importante en la ausencia de la enfermedad neoplásica, ayudando a prevenir el surgimiento de un tumor y durante todos los tratamientos del cáncer, para mejorar la absorción medicamentosa y optimizar los efectos de las terapias para tratar el cáncer. Después de la cirugía, el ejercicio es importante para recuperar la funcionalidad del brazo, durante la quimioterapia, radioterapia y terapia hormonal el ejercicio es importante para mejorar la eficacia de esos tratamientos. En la fase terminal en los casos de pacientes prostrados, el ejercicio todavía es importante para prevenir mayores complicaciones”.

¿Qué tipo de ejercicios son los que deben realizar las pacientes?

“Es recomendado hacer ejercicios aeróbicos todos los días (30 minutos, utilizando 50 hasta 80% de la frecuencia cardíaca de entrenamiento). Se deben realizar ejercicios con intensidad moderada a vigorosa, controlando siempre la frecuencia cardíaca. Además, es importante que no se utilicen ejercicios de resistencia muscular con carga y que utilicen solamente la carga del cuerpo (2 sets de 10 repeticiones). La progresión de los ejercicios debe ser en la cantidad de repeticiones y el monitoreo debe ser hecho antes, durante y después del entrenamiento, con escalas de esfuerzo, presión arterial, saturación y frecuencia cardíaca”.

¿Cuáles son los beneficios y los riesgos del ejercicio para las personas que padecen cáncer de mamas?

“Los ejercicios presentan muchos beneficios, respecto a la prevención de metástasis y mejora de la absorción del tratamiento del cáncer. Además, presentan efecto directo sobre la fatiga, calidad de vida y función cardiopulmonar. Los riesgos del ejercicio involucran surgimiento del linfedema, cuándo no es identificado de forma temprana. Así que las encuestas y el monitoreo del paciente durante los ejercicios es muy importante para identificar el surgimiento precoz de enfermedad en el sistema linfático”.

¿Cuándo no se debe realizar ejercicio o dejar de hacerlo?

“No se debe realizar el ejercicio en la condición de linfedema, alteración neurológica, respiratoria, caquexia extrema, nauseas, vómitos, alteraciones hemodinámicas y presencia de alteraciones sistémicas en el sistema nervioso”.

¿Hasta cuándo se debe hacer ejercicio y con qué frecuencia?

Los ejercicios deben empezar después del diagnóstico del cáncer y no deben ser interrumpidos, después de todos los tratamientos del cáncer, el ejercicio debe ser considerado mínimo 3 veces en la semana, con intensidad moderada a vigorosa y con su debido control y monitoreo del paciente”.

¿Cuál es el rol del Preparador Físico en este tipo de tratamientos?

“El preparador físico puede participar activamente en todas las etapas del tratamiento quimioterápico, radioterápico y hormonal. La prescripción de ejercicios debe ser hecha antes del tratamiento y siempre monitoreada. El conocimiento de ejecución de ejercicio y prescripción es de extrema importancia, lo que justifica la actuación de esto profesional en esos pacientes. Terapias recientes como el «HITS» son beneficiosas para mejorar la fatiga y calidad de vida durante la quimioterapia, así que los preparadores físicos presentan un bueno conocimiento sobre las modalidades de ejercicio”.

¿Cómo deben fortalecerse estos profesionales para contribuir con estas terapias y ampliar su campo laboral?

“Es muy importante la lectura de textos científicos, y participación en charlas, conferencias y congresos en estos temas. Hay siempre nuevos programas de ejercicios estudiados en la literatura que presentan eficacia y deben ser ejecutados. El monitoreo de los pacientes durante la ejecución del ejercicio, además de conocer sobre la patofisiología y posibles complicaciones secundarias del tratamiento del cáncer contribuyen para que el preparador físico cumpla de forma adecuada con su rol”.