Tomasinos son reconocidos por su calidad humana y excelencia académica

A poco tiempo de iniciar un nuevo año académico, tres jóvenes y estudiantes de la UST, IP-CFT Santo Tomás sede Concepción se consagraron como embajadores del premio Sello Santo Tomás 2019.

La ceremonia de distinción contó con la presencia de familiares, autoridades académicas, directores de carrera, quienes reconocieron el esfuerzo, compromiso, trabajo en equipo, capacidad de liderazgo y marcado sello valórico de los tomasinos que representan a las carreras de Terapia Ocupacional, Construcción Civil y Técnico en Podología Clínica.

Estefanía Daza, Mary Jara y Bryan Oporto, son los tomasinos que recibieron el reconocimiento este año en la sede penquista, los cuales en un desayuno junto a sus familiares compartieron las anécdotas y experiencias que han marcado tanto su vida familiar como estudiantil.

“Mucho más que una beca esto es un reconocimiento a quienes van a ser nuestros embajadores este año, no solo porque son buenos estudiantes sino porque son buenas personas, con formación humana y valores, eso para nosotros es lo más importante”, señaló Roger Sepúlveda Carrasco, Rector Santo Tomás sede Concepción.

Mary Jara, Centro de Formación Técnica

Durante el encuentro, Mary Jara, estudiante de la carrera de Técnico en Podología Clínica del CFT Santo Tomás sede Concepción, pronunció unas emotivas palabras que marcaron el inicio del evento. “Estudiar para mi significa tomar las riendas de mi vida y el darle la oportunidad a mis hijos de verme crecer profesionalmente y como persona, cuando me llamaron para esto agradecí mucho porque significa vida. Voy a poder trabajar y ser un ejemplo para mis hijos. Por ello, el haber recibido esto me llenó de alegría y sorpresa; tuve un flash desde cuando inicié y de todo el esfuerzo que he hecho para lograr lo que me he propuesto.”, manifestó.

Emocionada y llena de lágrimas, la estudiante y madre de cuatro hijos, Mary Jara, aseguró que las ganas de estudiar comenzaron cuando sintió que debía servir y ayudar al prójimo, “Desde muy pequeña me enseñaron los valores de la solidaridad, fraternidad y empatía, busco lo mejor para el otro y estar ahí cuando lo necesita. Tener este reconocimiento es valioso porque es una enorme responsabilidad, no solo con mis compañeros sino conmigo misma para seguirme preparando y esforzando en demostrar todo lo que he aprendido en la institución”.   

 Estefania Daza, Universidad

“Es extrovertida, colaboradora y entusiasta”, tal como la describe su mamá y abuela, Estefanía Daza, estudiante de la carrera de Terapia Ocupacional de la UST sede Concepción, desde que entró a Santo Tomás se ha convertido en ejemplo para sus compañeros no solo por participar activamente en la escuela de líderes y los trabajos voluntarios de Santo Tomás, sino por su gran sentido de responsabilidad, capacidad de trabajo y motivación. “No soy alumna de 7 pero si busco esforzarme al máximo, para mí la clave está en la organización, he tenido tres trabajos simultáneos y he podido cumplir con todas mis responsabilidades y eso me llena”, afirmó la presidenta del centro de alumno de Terapia Ocupacional, Estefanía Daza.

Bryan Oporto, Instituto Profesional

“Llegó a mitad de semestre y pasó la selección de alumnos para competir, me la jugué por él. Venía de Santa Juana y era de los primeros en llegar a las prácticas para darlo todo en WorkSkills y viendo su esfuerzo y compromiso con la competencia pudimos lograr medalla de cobre”, asintió Christian Zagal, Director de las carreras del Área de la Construcción de Santo Tomás sede Concepción.

En 2018, Bryan Oporto obtuvo el 3er lugar en la habilidad N° 15 de Fontanería en las III Olimpiadas de Habilidades Técnicas Worldskills Chile y Américas. Evento en el cual demostró no solo sus destrezas en el área sino también su empatía, adaptabilidad y responsabilidad frente al trabajo y formación académica. “Por mi curiosidad decidí estudiar construcción civil, aun cuando es sacrificado el rubro sé que todo tiene su recompensa. Para esta competencia me preparé un mes, fue difícil pero tuve el apoyo de mi familia, de mis profesores y de todo el instituto”, sostuvo el tomasino.

Oporto se destacó además como líder de una de las cuadrillas de voluntarios que visitó San Vicente durante el 2018 junto a Techo para Chile. “Fueron tres viviendas que construimos y se convirtió en una experiencia tremenda, sentí una satisfacción muy grande de poder ser un aporte para mi país, además de poder ver la sonrisa de la familia que recibió la vivienda eso me llenó mucho”, expresó.