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Alumnas de Santo Tomás Viña del Mar y los Trabajos Voluntarios en Quillota: “Es fácil criticar sin ayudar, pero es muy distinto cuando vienes y puedes ver otras realidades”Estudiantes rancagüinos fueron parte de los Trabajos de Invierno en Paine
Una veintena de alumnos del Instituto Santo Tomás se unieron a sus compañeros de la Región Metropolitana para ayudar en terreno a diez familias de las localidades de Hospital y Huelquén.
Cinco días de sus dos semanas de vacaciones, los estudiantes de Santo Tomás prefirieron dedicarlos a una actividad solidaria. Como ya es tradición en invierno y en verano, la casa de estudios realiza trabajos voluntarios en distintas localidades del país.
Este año, los alumnos de las sedes Rancagua, Estación Central, San Joaquín, Puente Alto y Santiago Centro llegaron hasta la comuna de Paine para colaborar en mejoras en los liceos de Hospital y Huelquén – donde alojaron los voluntarios – así como también ayudando a diez familias de dichas localidades.
Caras felices
Vanessa Aranguiz (25), estudiante de Ingeniería en Prevención de Riesgos, asistió por primera vez a esta experiencia y estuvo en Hospital. Ya en su carrera había visitado hogares de niños, pero esta vez colaboró en reparar el techo y el baño de una vivienda: “Me gustó mucho compartir con las personas, la historia de vida de la dueña de casa no era fácil, porque en su entorno tenían muchas trabas, entonces para ella tener su casa arreglada era un peso menos. Eso era bonito, ver su cara feliz cuando terminamos la tarea”.
También destaca el recibimiento de toda la comunidad y recuerda que, por iniciativa propia, con sus compañeros quisieron comprar una chapa nueva para el baño de la casa: “Fuimos a la ferretería y nos faltaban dos lucas y el dueño dijo que él las ponía. También la señora del almacén nos ayudaba siempre”. Vanessa ahora está buscando práctica y aunque está por terminar su carrera, espera repetir la experiencia.
Familias de sacrificio
En Huelquén estuvo Javiera Granifo (18), estudiante de Construcción Civil. Se enteró de los trabajos voluntarios de invierno por las redes sociales: “Lo que me motivó fue el poder ayudar a la gente que no tiene los medios necesarios. La familia que fuimos a ayudar es de mucho sacrificio y lucha porque el lugar donde viven no es de ellos y tienen miedo de que algún día puedan vender y sacarlos de ahí”. Javiera tiene lindos recuerdos de estos días de voluntariado y recomienda vivir esta experiencia: “Jamás se arrepentirán y lo más bonito es ver la emoción de las personas al momento de terminar el trabajo, haber ayudado a una familia que veía muy lejano el hecho de arreglar su casa”.
La Directora de Asuntos Estudiantiles de Santo Tomás Rancagua, Karina Bakx, destaca los valores que esta actividad deja en los estudiantes: “trabajo en equipo, solidaridad, esfuerzo, dedicación y constancia, los que sin duda, refuerzan una vez más nuestro Sello Tomista”. En todo el país, más de 650 voluntarios tomasinos participaron de los Trabajos de Invierno en distintas comunas. En enero del 2019, nuevamente los voluntarios tomasinos recorrerán Chile para una nueva versión de los “Trabajos de Verano Santo Tomás”.