Proyecto SmartBee inicia su primera etapa con visitas a apicultoras en cinco regiones del país

Como parte de la segunda etapa del proyecto SmartBee, estudiantes, docentes y directivos de las áreas de Recursos Naturales e Informática del Instituto Profesional y Centro de Formación Técnica Santo Tomás visitaron a diversas apicultoras en las regiones de Coquimbo, O’Higgins, Maule, Ñuble y La Araucanía. Esta iniciativa, busca implementar una solución tecnológica para el monitoreo en tiempo real de variables clave en la producción apícola.

El proyecto SmartBee se propone fortalecer el trabajo en terreno de las apicultoras mediante una herramienta de base tecnológica que les permitirá tomar decisiones informadas sobre el manejo de sus colmenas. Para ello, se combinan conocimientos apícolas y tecnológicos en un trabajo conjunto entre estudiantes y docentes de ambas disciplinas.

Primer acercamiento en terreno

Durante estas visitas, los equipos locales tuvieron la oportunidad de reunirse con apicultoras de cada región para presentar el proyecto, conocer sus predios y realizar diagnósticos técnicos. En Ovalle, por ejemplo, se definió el lugar de instalación de los equipos y se dejó trazada la ubicación de las futuras bases para la colmena inteligente. En Talca, el equipo fue recibido en los hogares de las apicultoras, generando un vínculo cercano y recogiendo datos del entorno relevante para la futura instalación.

En Chillán, la visita permitió evaluar aspectos técnicos como razas de abejas, condiciones del terreno y conectividad, además de presentar los alcances del proyecto. En Temuco, estudiantes y docentes realizaron un diagnóstico integral de los apiarios y comenzaron a construir un vínculo con las productoras que formarán parte activa de la experiencia. La sede Rancagua, también contemplada en esta iniciativa, realizará su visita en los próximos días.

Trabajo colaborativo e interdisciplinario

Cada visita contó con la participación de docentes y estudiantes de las áreas de Recursos Naturales e Informática, quienes aportaron desde sus respectivos conocimientos al diagnóstico y planificación del proyecto. En algunas sedes también se sumaron representantes del área de Construcción, como apoyo para las futuras instalaciones en terreno.

Este trabajo articulado entre disciplinas ha sido clave para comprender las necesidades locales y ajustar la solución SmartBee a las condiciones específicas de cada territorio, fortaleciendo además la experiencia formativa de los estudiantes.

En la siguiente etapa del proyecto, se contempla la instalación de los dispositivos SmartBee, lo que incluirá sensores, sistemas de transmisión de datos, paneles solares y una aplicación móvil para el monitoreo remoto. Posteriormente, se realizará una capacitación dirigida a las apicultoras para el uso efectivo de esta tecnología.

SmartBee no solo representa una oportunidad de aprendizaje para las y los estudiantes, sino también un ejemplo concreto de innovación aplicada, sostenibilidad y vinculación con los territorios.