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Estudiantes de Diseño Gráfico Santo Tomás crean nueva marca para Escuela Diferencial AspadepTomasinos de Puerto Montt participaron en Trabajos Voluntarios de Verano en la Región del Ñuble
Durante la iniciativa se llevaron adelante una serie de intervenciones en beneficio de las comunidades, consistentes en recubrimiento de viviendas, construcción de mediaguas, recuperación de espacios públicos, operativos sociales y actividades con los habitantes, entre otras.
Un momento único vivieron los estudiantes de Santo Tomás sede Puerto Montt en los Trabajos Voluntarios de Verano realizados en enero. La actividad solidaria, organizada por la Dirección de Asuntos Estudiantiles (DAE), ya es toda una tradición tomasina y para esta versión visitaron la comuna de San Ignacio en la Región del Ñuble.
Fiel al Sello Santo Tomás, la labor de los voluntarios y voluntarias que se congregaron en estos territorios tuvo como objetivo contribuir en el mejoramiento de la calidad de vida de las personas, a través de la realización de diversas acciones e intervenciones en beneficio de los habitantes, entre ellas, reforestación, recubrimiento de viviendas, construcción de mediaguas, recuperación de espacios públicos, operativos sociales, entre otras.
Energía, colaboración y mucha motivación fue lo que caracterizó a los 15 estudiantes de la sede puertomontina, así lo explicó Enrique Caico Massé, director de Asuntos Estudiantiles de la sede Puerto Montt, quien invitó a los jóvenes a inscribirse en la misma DAE para los Trabajos Voluntarios de Invierno que se realizan en julio, ya que “estos voluntariados suman a la formación personal y profesional de los tomasinos, entregándoles un sello valórico único”, detalló.
“Fueron 15 estudiantes del Centro de Formación Técnica, Instituto Profesional y Universidad, doce de ellos iban por primera vez lo que es buenísimo porque se sumaron a esta linda experiencia con energías nuevas. Estuvimos en cinco localidades y en cada una de ellas había un equipo DAE y anfitriones a cargo, en donde se hizo revestimiento interior y exterior de las casas, mejoramiento de techumbres y viviendas en baño y cocinas. Además, hubo tiempo para compartir con las familias, entregar regalos y disfrutar buenos momentos juntos. Estos voluntariados tienen un sentido muy fuerte de solidaridad, fraternidad y de asistir emocionalmente a las personas que viven en estos hogares en situación de vulnerabilidad donde tienen mucha necesidad de actividades de esparcimiento, por eso en la última jornada se hizo una zumbatón y una completada, lo que resultó bastante enriquecedor para todos”, agregó Enrique Caico.
En total, representando a la zona sur, llegaron alrededor de 200 tomasinos de las sedes Talca, Concepción, Los Ángeles, Chillán, Temuco, Valdivia, Osorno, Puerto Montt y Punta Arenas a prestar servicios a la comunidad de San Ignacio, ubicada en la Región de Ñuble. Allí, los jóvenes brindaron asistencia a los habitantes de las localidades de Pueblo Seco, Diguillín, Peralillo y Quiriquina, a través de labores como construcción de mediaguas, mejora de viviendas, recuperación de espacios públicos para niños y adultos, operativos fonoaudiológicos, veterinarios, podológicos, entre otros.
José Luis Contreras de la carrera de Preparador Físico del CFT sede Puerto Montt dijo que “fue una experiencia muy gratificante y de mucho crecimiento personal. Invito a todos los estudiantes que sienten la necesidad de ser parte de un colectivo, que se sumen a los trabajos voluntarios porque el sacrificio de algunos días trae una recompensa enorme en la formación profesional que Santo Tomás nos entrega. Estar cerca de la gente y sentir su agradecimiento es muy lindo, pero nosotros ganamos mucho más que ellos y ese sentimiento es enriquecedor”.
Sentimiento que comparte Lorenzo Alvarado de Ingeniería en Administración de Empresas de la sede puertomontina, quien indicó que el trabajo en conjunto con estudiantes de otras carreras y sedes también es muy trascendental. “Es muy bonito ver como nos unimos, sin conocernos, por un bien mayor, como nos mueve a todos el ayudar e invertir nuestro tiempo en un voluntariado que nos entrega herramientas y sentimientos muy gratificantes para nuestra persona, para los demás y para nuestro crecimiento, también, como profesionales”, agregó.