En Concepción

Seminario sobre educación positiva promueve el empoderamiento en escolares

Con el objetivo de promover en los docentes el concepto de educación positiva en el contexto escolar chileno, la carrera de Pedagogía en Inglés de la Universidad Santo Tomás sede Concepción, realizó el Seminario “Educación Positiva, autocuidado y manejo de estrés en el contexto escolar”, actividad que invitó a los padres y maestros a ser conscientes del desarrollo de capacidades y el empoderamiento en las aulas de clase.

Una de las expositoras fue Valia Carrasco Parra, Jefa de carrera de Pedagogía en Inglés de la UST sede Concepción, quien de manera participativa explicó los contextos escolares en los cuales se puede convivir para lograr una sociedad feliz y de bienestar.

La actividad contó también con la intervención de la psicóloga, Karen Bernales y el kinesiólogo Felipe Oisel, ambos de la Universidad del Desarrollo; profesores, directivos, equipos de convivencia escolar, CEIC capacitaciones y profesionales de la educación en general.

Nuevos desafíos

Durante su presentación, la académica reveló que recientemente un estudio inédito realizado por Elige Educar y Japyworks, determinó que 6 de cada 10 docentes chilenos se considera felices en sus trabajos y que a pesar de que su profesión genera grandes beneficios, no se escapan del estrés.

“Esta encuesta se realizó a 1200 docentes solamente y fue antes del cambio de la ley, ahora qué queremos para la juventud y la educación, uno escucha siempre a los padres decir que ellos quieren ver a sus hijos ser feliz, que reciban amor, tengan un propósito en la vida y que sean exitosos. Sin embargo qué enseñamos en las escuelas, matemáticas, lenguaje o ciencias pero no les enseñamos a ser felices, no les hablamos de amor”, afirmó Carrasco.

 De esta manera, explicó que aunque la parte académica es muy importante para el desarrollo intelectual y cognitivo de un individuo, no se puede dejar de lado ciertos pilares básicos que forman parte de la vida y la formación integral del ser humano. “No se habla de amor en la escuela, no se habla de felicidad y es aquí donde entra la educación positiva. Ella viene a servir de puente entre la parte académica y el todo, permite que ayudemos a los niños a tener esa conexión. Cuando logramos conectarnos con otra persona podemos enseñar lo que sea”.

Agregó que los docentes y estudiantes deben trabajar en base a la comunicación, el trabajo en equipo, los idiomas y el desarrollar competencias personales para potenciar la resiliencia, enfrentar el miedo al fracaso e incrementar la empatía como parte del crecimiento de vida.

Psicología positiva

También destacó que aunque no es nuevo esto de la felicidad y el bienestar en el contexto escolar, resulta imprescindible incorporar varios elementos o herramientas que promuevan la salud mental y las emociones positivas. Algunos de los que mencionó y que hizo eco en los presentes fueron el asombro, altruismo, compasión, empatía, diversidad, perdón, gratitud, felicidad y mindfulness.

“Hay que hacer el bien para sentirse bien, si nosotros le entregamos estas herramientas a los estudiantes para que exploten todo su potencial como individuos felices quizás qué tipo de profesionales estaríamos formando. En Chile contamos con varias iniciativas privadas y públicas que se enmarcan en la educación positiva, además del proyecto de ley de la educación emocional impulsada por la Fundación Liderazgo”.

Añadió que mientras haya docentes motivados habrá estudiantes también con el mismo nivel de entusiasmo, dada la influencia que hay en el día a día. Para incrementar la sensación de felicidad en la formación integral de los niños, recomendó la incorporación de la meditación y el yoga como estrategias de aula, prácticas que incluso se aplican en países como Bután y la India. «Bután es el único país que cuenta con un Ministerio de la Felicidad y que mide el producto interno bruto (BPI) con el grado de felicidad». 

Finalmente, instó a las instituciones en trabajar su propio autocuidado físico y mental, el de sus equipos para de esa manera bajar los altos niveles de estrés a los cuales se encuentran expuestos los profesionales de la educación y lograr un clima organizacional positivo en todos los contextos de la comunidad educativa.

En la jornada los asistentes participaron en un «Sorteo de Bienestar», en el cual podían acceder a una beca de Inglés otorgada por el Instituto Británico de Cultura de Concepción, una beca para estudiar Chino Mandarín con enfoque de negocios otorgada por CEIC Capacticaciones; cursos de defensa personal, jiu jitsu de Paradigma estudios, beca por un mes para el programa Bienestar del Centro Rukalihuen y degustación de parte del Verluys.