Deficiencia de vitamina D en embarazadas: investigadora de la Universidad de Granada impulsa colaboración con académicas UST

María José Aguilar, enfermera e investigadora de la Universidad de Granada, España, visitó las sedes Santiago y Talca de la Universidad Santo Tomás, donde expuso los resultados de una investigación que aborda el rol de la vitamina D durante el embarazo y su relación con la preeclampsia y la prematuridad.

En el marco de la Clase Magistral “Desarrollo Neuronal del Niño”, realizada en las sedes de Santiago y  Talca de la Universidad Santo Tomás, la académica María José Aguilar Cordero, de la Universidad de Granada (España), compartió su experiencia y las principales líneas de investigación que desarrolla en el ámbito de la salud materno-infantil.

Es de resaltar que, Aguilar es enfermera en la Unidad de Neonatología del Hospital Clínico Universitario San Cecilio. A su vez, cuenta con una amplia trayectoria científica, ha publicado numerosos libros y artículos en revistas especializadas, y ha presidido dos congresos mundiales, además de participar como ponente en diversos encuentros internacionales.

Durante su visita, la investigadora ofreció una entrevista sobre los avances de su trabajo en torno a la vitamina D durante el embarazo, el neurodesarrollo infantil y la colaboración científica con la directora de la carrera de Enfermería UST Talca, Cristina Levet, y las académicas Jessica Noack y Ana Sarmiento.

¿Cuál fue el propósito de su visita a Chile y, en particular, a la Universidad Santo Tomás?

«He venido a la Universidad Santo Tomás, a las sedes de Santiago y Talca, para dar unas conferencias que son la exposición del trabajo de investigación que estamos realizando. Ahí hablamos de la vitamina D durante el embarazo, del estrés en los niños con parálisis cerebral.

Asimismo hemos abordado el tema de los bancos de leche humana y el neurodesarrollo en los niño».

¿Qué factores motivaron el estudio sobre déficit de vitamina D en mujeres embarazadas y cómo se estructuró metodológicamente la investigación?

«El tema de la vitamina D durante el embarazo es un proyecto muy complicado porque fue un proyecto con fondos europeos y lo que hicimos con este estudio fue un preliminar, viendo si las mujeres embarazadas tenían falta de vitamina D y vimos que sí, que prácticamente todo el mundo tenía la vitamina D baja. Como paradoja, en España existe una alta exposición solar; sin embargo, observamos que muchas mujeres presentaban niveles bajos de vitamina D. Esto podría deberse al uso de protectores solares o a una menor capacidad de absorción del organismo.

Entonces pedimos un proyecto FEDER (Fondo Europeo de Desarrollo Regional), nos lo dieron y empezamos a trabajar sobre la vitamina D, porque el déficit en este caso hace que las mujeres desarrollen más hipertensión con un proceso de preeclamsia y los niños pueden nacer mas prematuros. Cómo sabemos el 50% de la discapacidad en el mundo es por prematuridad, es decir, es un costo impresionante tanto humano como económico.

Una vez descrito este fenómeno, iniciamos la suplementación con vitamina D en un grupo de mujeres atendidas en el Hospital Materno Infantil de Granada (España). En total, participaron mil mujeres: 500 recibieron 1.000 unidades diarias de vitamina D y las otras 500, 400 unidades».

¿Cuáles han sido los principales resultados obtenidos en esta línea de investigación?

«Los resultados fueron espectaculares. El tener 500 mujeres y darles vitaminas tomó un montón de tiempo, pensando que los proyectos se dan para 5 años. Así entonces vimos que realmente las mujeres suplementadas con 1.000 Unidades de vitamina D pues tienen menos problemas y hay menos prematuridad, que es un problema de salud pública impresionante en el mundo. Porque la prematuridad es el 50% de las discapacidades en los niños, y eso es sufrimiento no solo en lo económico sino en lo humano».

¿Cómo se está proyectando la articulación de este trabajo en Chile, especialmente con académicas de la Universidad Santo Tomás?

«Tenemos en Chile a varias personas que están en nuestro grupo de investigación. Acá en Talca tenemos a las académicas de la UST, Cristina Levet y Jessica Noack, quienes están dentro del grupo de investigación. También se incorporó Ana Sarmiento de la sede Santiago, quien está trabajando con nosotros. Así que esos proyectos se replicarán acá».

¿Qué recomendaciones o próximas acciones contempla el equipo en el marco de esta colaboración?

«Nosotros ahora mismo tenemos a una doctoranda que está en Granada y con quien estamos trabajando sobre la vitamina D, quien vendrá a Talca para seleccionar un grupo de embarazadas quienes vamos a suplementar».

¿Por qué considera importante replicar este tipo de investigaciones en contextos locales como el chileno?

«Nosotros trabajamos con mil mujeres, acá no se puede replicar con la misma cantidad, pero haremos una pequeña muestra para valorar y conocer cómo está la vitamina D aquí en mujeres, porque igual en España nos llevamos la sorpresa de tener la vitamina D baja. En resumen, lo bueno es que lo replicaremos en pequeñas muestras y si realmente hay problemas será cuestión de comunicar dicho problema a las autoridades pertinentes y que se suplementen con vitamina D.

Lo bueno de la vitamina D es que evitamos la prematuridad y eso es muy relevante. Las personas no se imaginan el gasto humano y económico que representa un prematuro. Cuando un niño nace con 400 gramos y 24 semanas de gestación es muy pequeño, entonces este niño, hasta que se lo lleven sus padres son 5 meses de UCI, lo que vale bastante. Así que la idea es prevenir eso, prematuridad y preeclamsia».

¿En qué momento del embarazo se recomienda iniciar la suplementación con vitamina D?

«12 semanas de gestación hasta el parto».

¿Qué mensaje le gustaría transmitir a las futuras generaciones de profesionales de Enfermería?

«A nosotras las enfermeras y enfermeros nos va a salvar la investigación, porque si no investigamos no tenemos credibilidad. Yo creo que hay enfermeras(os) que son valiosísimos y que pueden hacer cosas maravillosas a través de su vocación. La humanización de los cuidados tenemos que ir por ahí, pero esa credibilidad viene a través de de la investigación, porque si otro miembro de mi equipo me dice algo que corresponda a mi campo, yo le hablaré basado en investigación o lo último en la materia.

Las enfermeras tienen que estar preparadas y eso viene a través de la investigación. En España estamos súper valoradas las enfermeras y eso se debe porque nuestras enfermeras saben investigar y estar a la altura de otros profesionales».