Cesia Mundaca Lara: “Quiero ser una de las mejores”

Desde pequeña  Cesia Mundaca Lara (26) quería estudiar pedagogía, le gustaban mucho las matemáticas y quería ser docente en esta asignatura. Sin embargo, cuando ingresó por primera vez a la educación superior optó por una ingeniería, la que no terminó porque se convirtió en madre.

Luego de desempeñarse en distintas cosas, llegó a trabajar como asistente de aula en la escuela unidocente del  Villorrio del Talhuén, localidad rural de Ovalle en la que habita. Allí se reencontró con su vocación por la enseñanza.

“Me encantó trabajar con los niños, porque hay muchos con necesidades educativas especiales y no se potencian,  entonces buscaba formas de llegar a ellos, de una manera más didáctica. Ellos necesitan metodologías distintas, así fue que me encanté con los niños y decidí estudiar Técnico en Educación Especial”, asegura.

En marzo de 2020 ingresó a estudiar la carrera en el CFT Santo Tomás sede Ovalle, y a pesar de enfrentar múltiples dificultades logró un alto rendimiento académico, que la hizo merecedora del Premio Alumno Sello Santo Tomás 2021. Luego de este logro, el compromiso con su formación profesional es más fuerte, y más férrea su decisión de contribuir a una mejor convivencia en sociedad de las personas con discapacidad.

¿Cómo fue para ti estudiar en el año de la pandemia?

Para mí fue un poco complejo, (tiene dos hijos pequeños de 3 y 6 años) los niños son inquietos, fue difícil estar viéndolos,  levantarlos, prepararles la comida, estudiar con ellos. Además, tuve muchísimos problemas con la conexión a internet, al final del año llegó otra empresa proveedora, tuve que cambiarme de compañía y puede postular a la beca de conectividad de Santo Tomás. Así puede terminar bien el año escolar, porque durante todo el año estuve asistiendo a clases de manera intermitente, incluso tuve que viajar a Ovalle para poder conectarme.

A pesar de esas dificultades tuviste un buen desempeño académico y fuiste reconocida como Alumna Sello Santo Tomás 2021…

Gracias a Dios  me fue muy bien porque siempre fui muy responsable. Mandé mis trabajos a tiempo, busqué por aquí, por allá la forma de enviarlos, siempre estudié, soy muy buena escuchando y así entendía las clases  para realizar las pruebas o los trabajos y como tengo una experiencia previa eso me ayudó bastante.

¿Qué significa para ti ser reconocida como Alumna Sello 2021?

Es muy bonito ser reconocida, que reconozcan tu esfuerzo y ver en una hoja, en un papel que realmente tu esfuerzo funcionó, eso es gratificante.

Además, yo no tenía ningún beneficio para estudiar,  como estudié anteriormente ya no podía pedir nada más, así que tuve que cancelar todo el año sola. Mi pareja me ayudó y yo tenía un dinero que había ahorrado durante los tres años que trabajé en la escuela por eso me mantuve estudiando.

Mi pareja trabaja en una vulcanización, hace mucho esfuerzo día a día por llevar el pan a la mesa, era mucho el gasto que teníamos. Esto nos da un alivio como familia y el ánimo para seguir estudiando, porque ganar estos premios te ayuda a mentalizarte.

Tú participaste en el concurso de cuentos sobre el Tema Sello Santo Tomás 2020 y obtuviste  el segundo lugar a nivel nacional, ¿por qué decidiste participar de esa iniciativa?

Desde chica me inculcaron lo que era el respeto y la inclusión, aceptar a todos cómo son,  porque todos somos iguales,  para mí es súper importante eso, y lo quise reflejar en mí cuento. Ver desde otro punto de vista a las personas, no sólo como que tienen una discapacidad y tratarlos como enfermos, porque todos tenemos una capacidad diferente, en eso me mentalice. Para mí fue muy bonito trabajar en ese cuento.

¿Qué te parece que se hagan estas iniciativas, con las que se fomenta la formación valórica?

Cuando salgamos al campo laboral eso va a ser lo más importante para nosotros, el respeto y  los valores que nos ha entregado la institución.  Encuentro que esta es una muy buena instancia para que nuestros compañeros puedan saber y reconocer qué valores tienen y de esa manera llevarlos al ámbito laboral y trabajar a través de ellos.

Ser una de las mejores

¿Cómo te proyectas en este segundo año académico, considerando que seguimos en pandemia?

Este año espero ser mejor que el año anterior. El año pasado tuve muchos problemas por la conectividad, por el tema económico y como este año se me han resuelto varias de esas inquietudes, quiero trabajar y ser una de las mejores Técnico en Educación Especial.

Y ¿cómo te proyectas hacia el futuro, cuáles son tus expectativas?

Espero en un futuro poder cambiar el punto de vista que tiene la comunidad de los niños con necesidades educativas especiales,  llegar a un colegio, establecerme y tratar de trabajar con la comunidad educativa y capacitarla porque hay mucho desconocimiento sobre este tema. Por ejemplo, yo no sabía lo que era el autismo, cómo trabajar con niños con autismo,  no sabía cómo trabajar con una persona con discapacidad intelectual, por eso quiero darlo a conocer en la comunidad, que está muy analfabeta en ese tema.

Mi meta es llegar a una escuela y que los niños convivan entre ellos, que conozca la necesidad que tiene su compañero y que sepan valorarlo como persona.