Estudiantes de Santo Tomás Concepción colaboran en formación preescolar de niños de parvulario rural

Con un proyecto de Vinculación con el Medio denominado “Bordadores de Emociones”, estudiantes de Psicopedagogía, Técnico en Educación Parvularia 1° y 2° Básico, y Técnico en Educación Especial trabajaron con niños y niñas durante 6 semanas en el Parvulario Rural Manderscheid de Copiulemu de la comuna de Florida.

Esta iniciativa nació desde el Área Educación de Santo Tomás Concepción, cuyo nombramiento se inspiró en las mujeres bordadoras de Copiulemu, y a la vez por el requerimiento del jardín infantil en trabajar la educación emocional de los niños y niñas.

Lilian Poveda, directora del Área Educación de Santo Tomás Concepción, enfatizó sobre la relevancia del proyecto añadiendo que, en este tipo de vínculos, los y las estudiantes fortalecen su formación técnico-profesional ya que se trabaja en un contexto real. “En esta experiencia confluyen varios factores desde la mirada académica, actitudinal y de las habilidades, pues en este momento es donde los estudiantes deben reflejar el dominio de los contenidos trabajados durante su proceso formativo”.

Durante la colaboración, los alumnos de la casa de estudios superiores, abordaron las temáticas de arterapia, yoga para niños, mindfulness, musicoterapia, corporalidad, comunicación asertiva y resolución de conflictos.

La alumna Aracelly Muñoz Delgado, quien cursa 4° de Psicopedagogía en el Instituto Profesional Santo Tomás, sostuvo que “desde mi experiencia, siento que el mayor beneficio fue experimentar el trabajo con niños y niñas de educación preescolar y descubrir sus motivaciones. Me llamó la atención cómo, desde la curiosidad, resolvían en cooperación las actividades programadas, las que ayudaron a los estudiantes a integrar sus emociones en cada momento de aprendizaje. Es decir, podían sentir sus emociones y mejorar en autorregularlas, todo esto beneficia mi formación psicopedagógica, al tener una perspectiva real de la educación parvulario rural”.

Sandra Muñoz, directora del Parvulario Rural Manderscheid de Copiulemu, indicó que “la participación de los estudiantes de Santo Tomás en nuestro parvulario rural, logró enriquecer la experiencia educativa de los niños y niñas, así como también aportar con nuevas metodologías y enfoques innovadores. Estamos convencidos de que su creatividad y entusiasmo contribuirán significativamente al desarrollo integral de nuestra comunidad educativa”.

Los estudiantes de educación superior fortalecieron el desarrollo integral, promoviendo el desarrollo cognitivo y social de los infantes. Además, potenciaron la capacidad de imaginación y exploración de los niños y niñas, incrementando su autonomía y confianza. Este proyecto se desarrolló gracias a los fondos de la Dirección de Vinculación con el Medio de Santo Tomás, permitiendo que tanto la comunidad de la casa de estudios como el parvulario rural, puedan beneficiarse mutuamente.