Del aula al territorio: VcM fortalece la formación estudiantil con experiencias reales

La Universidad Santo Tomás, a través de su Modelo de Formación, presenta una orientación práctica y vinculada, cuyo propósito es que los estudiantes apliquen lo aprendido en situaciones reales o simuladas. 

Este enfoque permite crear redes entre la academia y la comunidad, proporcionando una educación contextualizada y significativa, donde puedan desarrollar una comprensión profunda de su campo de estudio, asuman una responsabilidad social como futuros profesionales y mejoran sus competencias prácticas, incrementando su empleabilidad y desarrollo profesional.  

Esta articulación se desarrolla en la línea de acción de Docencia Vinculada, dentro de la cual, la metodología Aprendizaje + Servicio (A+S) juega un rol crucial como un rasgo distintivo del currículum. 

A+S permite a la Universidad fortalecer la vinculación de la comunidad académica con las necesidades de la sociedad y promover procesos formativos con pertinencia territorial, favoreciendo experiencias de aprendizaje prácticas y contextualizadas.

 La institucionalización de esta metodología se consolidó en el marco del Proyecto Estratégico Institucional (2019-2023), a través del cual se definió su incorporación curricular y generó el Marco de la Metodología de Aprendizaje + Servicio en la UST, el que establece los atributos de esta estrategia, junto con definir su implementación en todos sus programas de pregrado.

En dicho contexto, se crea la Coordinación Nacional de Aprendizaje + Servicio (2023), que brinda orientación técnica y acompañamiento a los Comités Curriculares de cada carrera, contribuyendo a su implementación en coherencia con el marco. Asimismo, y como parte del Programa de Formación y Desarrollo Docente, se diseñó el primer curso de A+S (2020), el que se actualiza en 2024 para responder los lineamientos del marco institucional. Entre el periodo 2021- 2024, se han capacitado a 536 académicos(as) de la institución.

Ángela Venegas, Coordinadora Nacional de Aprendizaje + Servicio explicó que la metodología A+S de la Universidad Santo Tomás permite que los(as) estudiantes adquieran conocimientos técnicos vinculados a su carrera y también potencia competencias éticas, sociales y reflexivas. «Esto significa que los futuros profesionales aprenden a analizar situaciones reales de la comunidad, a trabajar en equipo, a tomar decisiones responsables y a generar propuestas que realmente impacten a las personas».

«Gracias a esta experiencia, los estudiantes desarrollan un sentido profundo de responsabilidad social y compromiso ciudadano, entendiendo que su formación académica tiene un propósito más allá de las aulas: contribuir al bienestar de la sociedad. Cada proyecto A+S los enfrenta a desafíos auténticos, donde la teoría se aplica en la práctica y cada acción cuenta para mejorar la vida de la comunidad. En coherencia con nuestro modelo formativo UST, que forma profesionales competentes y comprometidos con el entorno que los rodea», enfatizó.

Es así como en 2025, el 100% de las carreras regulares y planes de continuidad de la UST cuentan con asignaturas que implementan la metodología A+S. 

Desde la dimensión de Vinculación con el Medio, la Universidad buscando fortalecer la relación de la comunidad académica con las necesidades de la sociedad y aportar al proceso formativo, es que cuenta con ocho programas institucionales: Creciendo Juntos, Clínica Psicológica, Clínica Jurídica, Vigilantes Ambientales, InnovAcción, Salud Comunitaria, Una Salud y Emprendimiento y Gestión Empresarial. 

Estos programas son sistemáticos, disciplinares, con pertinencia territorial y se orientan al logro de contribuciones a largo plazo de los impactos declarados en la Política de Vinculación con el Medio. 

En 2024, los programas institucionales de VcM contaron con 72 asignaturas, de las cuales 43 utilizaban metodología A+S. 

 Alex Silva, Subdirector de Vinculación con el Medio de la UST comentó que por medio de los programas institucionales se promueve el desarrollo de competencias diferenciadoras en los estudiantes. “Salen al mundo laboral preparados, porque ya conocen los desafíos y las dinámicas de distintos grupos de interés, se relacionan con socios comunitarios y logran aplicar sus conocimientos y poner en práctica lo que han aprendido en la sala de clases”.  

“Es así como los estudiantes, por medio de esta experiencia educativa transformadora y desafiante, logran identificar problemáticas de las comunidades y brindar soluciones innovadoras” enfatizó el Subdirector. 

Para lograr una mayor comprensión sobre el aporte de la formación contextualizada, el Subdirector de VcM UST manifestó que como institución desarrollan una serie de  cursos para capacitar al cuerpo docente y administrativo. “Este año junto al equipo de Desarrollo Profesional y Formación de la Vicerrectoría de Personas lanzamos el primer curso online asincrónico de VcM de la Universidad, que recoge de manera clara y concisa, lo que declaramos en nuestra Política y cómo lo implementamos a la fecha”. 

Otro aspecto que la UST considera clave es la evaluación de los principales actores que participan en las actividades enmarcadas en los programas VcM. En esa línea, Mariela Matamoros, Subdirectora de Evaluación comentó que en 2024. «El índice de contribución externa fue de 84% entre los más de 4.000 beneficiarias/os consultados si el servicio recibido fue pertinente y útil. Mientras que la contribución interna fue de un 90%, luego que más de 6.000 estudiantes y 500 académicas/os respaldaran que los programas aportan a la formación integral”.

Respecto a los resultados obtenidos en A+S en el periodo 2023-2024, la institución declara que todas las dimensiones registraron una alta satisfacción, entre ellos el ámbito aprendizaje reflejó un 91,6% de logro. Mientras que los socios comunitarios evaluaron la dimensión servicio con un 94% de logro promedio en 2023 y 2024.  

“Por medio de esta medición, los grupos de personas que fueron parte de la evaluación valoraron y destacaron competencias respecto a la calidad de las relaciones humanas, tales como el respeto, el trato cordial, la diversidad, la actuación ética y el sentirse acogidos, valorados y escuchados por estudiantes y docentes” comentó la Subdirectora. 

Los resultados son analizados semestralmente por las carreras, quienes elaboran un informe de retroalimentación de la experiencia de A+S al interior de cada asignatura.