Ramón Chavarría, egresado de Gastronomía: “Me gusta devolver la mano y siempre he permanecido conectado con mis profesoras”

Su presentación fue una de las más esperadas por el público estudiantil que completaba el salón del Hotel Four Points By Sheraton Los Ángeles; lugar donde se llevó a cabo el Primer Festival Gastronómico, Pastelería y Nuevas Tendencias de Santo Tomás, sede Los Ángeles.

Y es que Faryd García, ganador de la Tercera Temporada de Máster Chef Chile, quien fue invitado como expositor en el evento tomasino, es un joven que con su talento, esfuerzo y perseverancia le dobló la mano al destino, y permanentemente continúa demostrando que es posible hacer realidad los sueños. Lo anterior, porque está empeñado en terminar la enseñanza básica, para luego estudiar la carrera de gastronomía y convertirse en un gran Chef.

Clase Magistral

En la jornada compartió la elaboración y receta de su plato distintivo, las Sopaipillas Pasadas de estilo gourmet; al mismo tiempo que relató cómo había su paso por Máster Chef y la manera en que esta experiencia le había cambiado la vida.

Cabe destacar que su presentación fue apoyada y guiada por el Chef Ramón Chavarría, estudiante egresado y Sello de Sato Tomás Los Ángeles, quien además fue Profesor en el programa de televisión. De esta forma, juntos llevaron a cabo la clase magistral “La Trayectoria de un aficionado”, la cual en todo momento estuvo acompañada por toques de humor y una pizca de simpatía; ingredientes que sin duda fueron el condimento perfecto para el desarrollo de una jornada distendida y el trabajo de cocina, que cautivó a todos los presentes.

Faryd García, ganador de la Tercera Temporada de Máster Chef Chile

Respecto a tu plato especial de Sopaipillas Pasadas, ¿Cómo nace y cuál es su particularidad?

Este plato nace sacando ideas de distintos Chef, combiné estilos de cocina e inventé el mío. Al inicio me guié por uno español que transformó un licor en postre, entonces yo quise transformar algo típico chileno como una sopaipilla pasada, en un postre sofisticado. De alguna manera para que la gente viera que algo tan típico y rústico se puede convertir en algo tan bello.

El plato es una deconstrucción de sopaipillas pasadas, en base a una esponja de la masa de sopaipilla, que trabajamos en un sifón.  Esto es una esponja que tiene los mismos ingredientes de una sopaipilla, harina, zapallo, sal. Le incorporé huevo y un poco de azúcar, porque necesitábamos hacer una especie de biscocho. El zapallo lo cocinamos en horno, para que concentrara sabores y quedara más firme.

Sale de lo común, es innovador y me identifica, esa es la idea. Mi intención es darle un toque sofisticado a la comida chilena y me gustaría probar suerte en alguna competencia internacional.

¿Cómo consideras que ha cambiado tu desempeño en la cocina desde que saliste de Máster Chef?

Ha cambiado un montón. Me he perfeccionado cada día un poquito más, estudiando para ser un gran Chef reconocido en Chile. Siempre hay que aspirar a más con perseverancia y esfuerzo.

¿Tienes algún proyecto en mente?

Sacar mi título y tener mi propio restaurant. Un sueño era tener mi propio plato y ya lo tengo, que son las sopaipillas pasadas, porque me identifican. Es lo que preparé hoy día. Entonces el próximo sueño es tener mi propio restaurant y que éste sea reconocido en Chile.

Chef Ramón Chavarría, estudiante egresado y Sello de Sato Tomás Los Ángeles

¿A qué estás dedicado hoy día?

Hoy en día yo tengo trabajo independiente, tengo una pequeña empresa de cenas a domicilio, que se llama Pil Pil Santiago. También estoy trabajando en eventos particulares.

¿Desde cuándo que estás siendo tutor o instructor de otras personas?

Comencé el año 2016, cuando entré a la Tercera temporada de Máster Chef. Había trabajado también en la segunda temporada y Junio Máster Chef. Ahora estoy haciendo capacitaciones para ayudar a emprendedores.  Ha sido una experiencia muy bonita.

Los Ángeles está creciendo en el área gastronómica ¿Has pensado en trabajar en la zona?

Si, me gusta mucho la idea. Mi idea es volver en un par de años más, ojalá a Los Ángeles o cerca, a instalarme con mi propio restaurant. Es una buena zona para crecer.

Tu vínculo con Santo Tomás nunca lo has perdido, ¿Por qué te mueve volver?

Porque acá está la familia y porque la enseñanza que me dieron fue muy importante, fue muy fuerte, hay mucho sentimiento y por eso siempre he estado ligado a Santo Tomás de Los Ángeles. Me gusta devolver la mano, siempre he permanecido conectado con mis profesoras.

¿Qué consejo le darías a los jóvenes estudiantes de la carrera Gastronomía Internacional y Tradicional chilena de Santo Tomás?

Cocinen mucho, practiquen más que nada, porque es la única forma de ir mejorando y siempre con cariño. Si quieres ser Chef, primero hay que ser cocinero.