Doctor Franz Villarroel: “La terapia para el cáncer ha cambiado dramáticamente en los últimos años”

En la  UST Valdivia se desarrolló la clase magistral “El bueno, el malo y el feo contra el cáncer: Medicina Personalizada e Inmuno-Oncología”, la que estuvo a cargo destacado expositor Doctor Franz Villarroel, investigador del Departamento de Patología y Patología Infantil de la Escuela de Medicina de Yale University. La actividad fue organizada por Tecnología Médica UST Valdivia.

Al ser consultado por su exposición, Villarroel, precisó que:

“En está charla se discutió los mecanismos que el tumor tiene para evadir al sistema inmune e impedir que el cuerpo humano elimine al cáncer usando sus propias herramientas. Para ello, se abordó temas relacionados con la inmunoterapia, esta remueve o encubre estas estrategias del tumor y le devuelve la capacidad a los linfocitos y macrófagos para matar al tumor. Obviamente no hay terapias infalibles, pero está es la que mejor funciona y que salva y extiende vidas en USA y Europa”.

¿Cuál fue el objetivo de venir desde tan lejos a exponer sobre la inmunoterapia?

“Mi objetivo es crear espacios y discusiones, yo soy docente y amo enseñar y cada vez que puedo lo hago. He tenido la fortuna de trabajar como científico en Chile, España y ahora en USA. Creo en los estudiantes y profesionales chilenos, a pesar de que muchos están ciegos por egos desbordados y sin fundamento. Todos podemos crear, innovar, ayudar y mejorar nuestro entorno… es solo una cosa de deseos y ganas”.

Terapias contra en cáncer en UST Valdivia

¿Cuál es su labor en Yale University?

“Yo trabajo en investigación traslacional o aplicada, que significa tomar información básica y previamente demostrada y aplicarla directamente en pacientes, por ejemplo, para facilitar el diagnóstico de una enfermedad o bien el mejor tratamiento. Hago esto como investigación postdoctoral en la escuela de medicina de la universidad de Yale. El laboratorio se emplaza en el departamento de patología y se dedica a patología molecular y experimental, y es El Centro de referencia para definir biomarcadores en cáncer”.

¿Qué es lo que más le interesa personalmente que los alumnos y docentes de la UST hayan comprendido de su disertación?

“La pregunta es difícil, pero es más fácil si lo explico de esta forma: La terapia para el cáncer ha cambiado dramáticamente en los últimos años, afortunadamente en una buena forma. Hoy cada vez son menos los pacientes que mueren, y casi todos reciben un diagnóstico oportuno y una terapia adecuada. Sin embargo, esta realidad no es la que se vive en Chile. Las limitaciones técnicas y de innovación están definiendo un precario futuro del paciente oncológico y en especial en etapas avanzadas. Los clínicos, profesionales de los laboratorio e investigadores tienen capacidades intelectuales suficientes para traer los avances en salud desde otras latitudes, pero el sistema y la mala gestión institucional y personales lo impiden. Aún nos creemos y hacemos creer al resto que somos competitivos, como se dijo antes del jaguar de Latinoamérica, pero en realidad somos gatos de campo, que se defiende a veces de mala forma para sobrevivir y termina matando a los de su misma especie para subsistir. ¿Eso queremos para Chile?