Estudiantes de Santo Tomás Viña del Mar: “Los Trabajos Voluntarios de Invierno son una experiencia enriquecedora”

  • Junto a un grupo de UST Santiago, las y los tomasinos de la Ciudad Jardín estuvieron cinco días apoyando a la comunidad de Peñaflor.

Finalizaron los Trabajos Voluntarios de Invierno y para las y los estudiantes de Santo Tomás Viña del Mar resultó ser una experiencia novedosa, ya que esta vez se realizaron fuera de la Región de Valparaíso y en compañía de una delegación de UST Santiago. Fueron cinco días en los que se apoyó a la comunidad de Peñaflor en diferentes tareas, principalmente en mejoramiento de viviendas.

Carlos Zúñiga, estudiante de Servicio Social, comentó que “me siento realizado por el trabajo comunitario que hemos hecho tanto acompañando a las familias como reforzando sus casas o lo que necesiten”. Agregó que, en lo personal, el aporte de los Trabajos Voluntarios es que “las personas mejoran mientras más tratan con otras personas, así que mientras yo más me enfoque en estos voluntariados para ayudar, mas podré ir aprendiendo de las personas que me acompañan y de las personas a las que ayudo”.

Sobre la posibilidad de compartir con estudiantes de otras carreras y sedes, dijo que “siempre es una experiencia grata ver cómo somos tan diferentes, pero podemos trabajar juntos teniendo un objetivo en común”.

Alexandra Cabrera, también estudiante de Servicio Social, señaló que “lo pasé genial, fue una experiencia bonita, enriquecedora, donde pude conocer la realidad de distintas personas. Me motivé a inscribirme por mi carrera, yo estudio Servicio Social, entonces me gusta interactuar con las personas, ayudarlas, es bueno conocer esas realidades”.

“Yo no soy una persona tan sociable, entonces por ese lado me gustó poder socializar, conocer nuevas personas, un nuevo ambiente. Fue agradable, bonito poder compartir, contar nuestras experiencias nos ayuda a fortalecer el carácter, los valores”, agregó.

“La más viejita”

Por su parte, Cristina Abarca, estudiante de Técnico en Trabajo Social, se calificó como “la más viejita del grupo”, pero dice que eso no fue impedimento para disfrutar de los Trabajos Voluntarios: “Fue una experiencia muy buena porque por un lado está la construcción de casas y por otro lado los casos sociales que vimos. Vinimos a ayudar a personas mayores y uno queda con el corazón llenito cuando los ve y sienten que alguien se preocupó de ellos y vino a ayudarlos”.

“Ha sido maravilloso, me he reído caleta, a pesar de ser la más viejita de todo el grupo, pero ha sido súper enriquecedor, los chiquillos están a la par conmigo, no me han discriminado por mi edad, lo pasamos excelente. Esto me ayuda en mi crecimiento personal, es importante humanizarnos como profesionales, para poder intervenir el día de mañana en casos sociales”, finalizó.