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Balance positivo tras el cierre del programa ‘Una Salud’ de Medicina Veterinaria de la UST TalcaAprende Emprende: la música y la docencia como herramientas de inclusión en Puente Alto
Descubre la inspiradora historia de Arely Acosta, bajista y docente, quien a través del proyecto emblemático «Aprende Emprende» del IP-CFT Santo Tomás, transforma vidas, reduce brechas de inclusión en jóvenes con discapacidad cognitiva y genera un impacto positivo en la comunidad.
Es una de las cinco noches de celebración de Fiestas Patrias en el Parque O’Higgins, cuando en el escenario, comienzan a sonar los acordes de una cueca urbana, el bajo va marcando los tiempos y la batería el ritmo, mientras las voces femeninas toman el protagonismo de la puesta en escena.
Es así como Arely Acosta, bajista del grupo Las Torcazas interpreta y realiza la segunda voz para los más de 100 asistentes al evento, entre ellas, parejas mueven sus pañuelos y bailan un pie de cueca, mientras suena:
“Los amores, las pasiones
Los olvidos, las traiciones
El amor que tuve sufriendo se fue
Tengo esperanza que vuelva otra vez”.
Por uno de esos días durante septiembre, uno especialmente nublado como ocurre al llegar la primavera, Arely, quien además de músico de profesión, es madre y docente de las carreras de Técnico en Educación Parvularia; y Educación Especial en Santo Tomás, se dirigió a una Escuela Especial en La Pintana para ser parte de uno de los talleres del proyecto emblemático de la sede “Aprende Emprende” Escuela de Emprendimiento para Personas en Situación de Discapacidad Cognitiva.
Su trayectoria en la música, más 18 años de docencia y conocimiento en neurociencia, le han permitido relacionarse en su nueva tarea como guía de un grupo de estudiantes de Santo Tomás para realizar una serie de talleres y operativos a jóvenes con discapacidad cognitiva que forman parte del proyecto de Vinculación con el Medio de la sede.
Sin embargo, ese día no fue sencillo; se perdió entre las calles, iba atrasada y era primera vez que visitaba ese recinto. “Una vez llegué, conocí a estos jóvenes con discapacidad cognitiva, que eran muy autónomos y me sorprendió que no fue fácil interactuar, porque ellos ya lo hacían entre ellos, no necesitaban a un externo. En ese minuto, lo vi como un desafío para poder incorporarme y relacionarme, fui yo la que busco ser integrada y lo logré conversando simplemente de fútbol”.
Esa facilidad que señala para relacionarse y aceptar desafíos se debe a rasgos que siempre han estado en su cotidianidad: “Mi trabajo artístico musical y docencia me han permitido vincularme con las personas: niños, niñas y adolescentes. Además, yo tengo el diagnóstico de Déficit de Atención Severo, entonces soy multifocal; mi atención está en muchas cosas al mismo tiempo”.
Arely se sumó a la institución en 2020 y este fue su primer año siendo parte del proyecto. Destaca el equipo humano de docentes y administrativos que lo conforman, por su compromiso, profesionalismo y organización para brindar un buen servicio, además de eso reconoce que “lo que a mí me enamoró del proyecto, es poder convencer, motivar, enseñar, estimular y desarrollar habilidades en los estudiantes de Santo Tomás y los alumnos de las Escuelas Especiales”.
En ese sentido, Arely comenta que como docente prestó apoyo para brindar confianza y seguridad a los estudiantes del IP-CFT y que pudiesen enfrentarse a retos como que se cancelara la sesión, supieran lidiar con crisis y superaran la frustración, asumiendo un rol desde su profesión para ayudar al otro desde el respeto.
“Yo de todas maneras me siento muy contenta, conforme con lo que logramos, porque no fue no fue algo simple, fue un gran desafío en algunas áreas. Por sobre todo destaco el grupo de mujeres estudiantes de primer año, por su compromiso y cariño a la hora de realizar las intervenciones”, comentó.
El trabajo y acompañamiento de los estudiantes de las distintas carreras se vio reflejado en la Feria de Talleres Laborales, donde los jóvenes participantes del proyecto emblemático ofrecieron los productos elaborados por ellos mismos como bombas de semillas, fosforeros y productos fabricados con resina epóxica, en el Espacio Urbano de Puente Alto.
La actividad de cierre de “Aprende Emprende” contó con la presencia de jóvenes de las Escuelas Especiales de la Provincia Cordillera, apoderados, socios comunitarios, estudiantes, docentes y administrativos Santo Tomás.
Al final, todo el esfuerzo, coordinación, frustración superada y entusiasmo tuvo grandes frutos. “Yo espero que en próximas versiones del proyecto podamos implementar la musicoterapia, porque el arte terapia es muy efectiva para la regulación emocional: reacciones, impulsos y la concentración”, concluye entusiasta.
Conoce más sobre el proyecto emblemático de IP-CFT Puente Alto “Aprende Emprende” aquí
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