Carrera de Fonoaudiología de la UST Talca realizó conferencia clave sobre la comunicación de malas noticias en el ejercicio profesional

El fonoaudiólogo desempeña un papel fundamental en la comunicación efectiva dentro del ámbito de la salud, particularmente en la gestión de malas noticias. Su formación en técnicas de comunicación y en la comprensión de las dificultades lingüísticas y emocionales que pueden surgir al enfrentar diagnósticos adversos, los hacen profesionales claves para abordar estas situaciones con sensibilidad y empatía.

Es por lo anterior, que en el marco del Día del Fonoaudiólogo, la carrera de Fonoaudiología de la Universidad Santo Tomás (UST) sede Talca, organizó una conferencia sobre la comunicación de malas noticias en el ejercicio profesional. La charla estuvo a cargo de Sebastián Contreras, docente en la mencionada casa de estudios superiores y que cuenta con amplia experiencia clínica en UCI Adultos.

Al respecto, el fonoaudiólogo, valoró la instancia para educar a los futuros profesionales respecto del manejo de información sensible a pacientes y familiares. «Los fonoaudiólogos necesitan estrategias para comunicar las malas noticias relacionadas con tratamientos que estén vinculados a su propia profesión, pero en segundo lugar, porque necesitan estrategias para enseñar como profesionales especialistas de comunicación a otros profesionales de la salud», dijo. 

En tanto, Ana María Orellana, directora de la Carrera de Fonoaudiología de la UST Talca, destacó que «el expositor abordó el tema de manera profesional, con la experiencia y bagaje académico que tiene. Entonces consideramos una oportunidad para brindarles esta formación a nuestros estudiantes, que es contribuir con un granito de arena a su formación profesional académica y mostrando el sello humano».

Por su parte, María Paz Cid, estudiante de Fonoaudiología, subrayó la importancia de contar con herramientas adecuadas para manejar situaciones complejas. «A nosotros en lo personal no nos enseñan cómo abordar eso, así que es bueno saberlo, ya que uno se acerca a saber que podemos decir a las familias respecto de qué palabras ocupar o comunicarnos de manera pragmática para informar eso. Lo esencial es ponernos en el lugar de las familias», finalizó.