María Cecilia Vegas: “Los jóvenes que rindieron la PSU deben visualizar lo que les gusta hacer y luego, elegir una carrera”

Para ello, la directora comienza relatando su propia experiencia:

“Hasta que yo estaba en 3º medio, hace algunos tantos años atrás, solo pensaba estudiar derecho… me gustaba la historia, siempre me dijeron en mi familia que era buena para alegar, discutir y defender causas perdidas, además, en esa época de los 80, había muchos ideales políticos en plena efervescencia.  Bueno ese año me di cuenta de que el derecho no era lo que yo creía. Gran problema. ¿Qué haría entonces?, primero vi lo que me gustaba, y luego, me informe sobre una carrera que se había abierto en mi ciudad el año anterior, psicología,  encontré en ella, todo lo que me gustaba”.

Lo primero que señaló Vegas, es que los alumnos en búsqueda de un futuro deben enfocarse en un área que les guste, ya que esa será la base, pero no su límite.

“Hoy existe la posibilidad de especializarse permanentemente por lo que puedes ir avanzando en tu formación e ir descubriendo áreas que parezcan más interesantes, o en la medida que trabajes puedes descubrir algo de lo que quieres aprender más”, sostuvo.

Además, agregó que para aquellos estudiantes que no tuvieron los resultados esperados en la PSU para el ingreso a una institución, no deben quedarse paralizados durante el año, sino que tomarlo con calma, estudiar nuevamente, dedicarse a la realización de talleres o cursos de actividades que disfruten, o trabajar, para luego, comenzar el otro año. “Es importante que los alumnos dejen de ver a la prueba como una amenaza, porque no lo es. Es un desafío”.

Algunas cosas para considerar en este último caso son: tener las cosas claras, no caer en la desesperación y tomar acciones en el asunto como lo es el prepararse más para la prueba del año siguiente. También señaló que para aquellos que no saben por que carrera decidirse, deben pensar cuál es su área favorita para desenvolverse, y en base a eso, tomar una decisión pensando en la felicidad que esta te proporcionaría.

Dentro de estos consejos también es importante incluir a los padres que influencian o presionan a sus hijos e hijas a tomar una decisión, lo ideal es permanecer al margen, aconsejar cuando se les solicite, y no proyectarse a través de los hijos.

“Siempre es bueno que, al momento de elegir una carrera, los hijos sean quienes decidan, y no los padres. De lo contrario, muchas veces se generan cosas como el que les vaya mal durante el primer año, o que logren sacar la carrera sin que les guste lo que hacen”.

Los millennials

Actualmente se les ha otorgado nombres populares a las generaciones, y en ellos, se puede apreciar las diferencias. Como por ejemplo, los “Baby Boomers” (50-68 años) son los abuelos, quienes se conformaban con el ideal de entrar a una empresa y terminar jubilando en ella, apreciando la estabilidad, y la contraparte, son los “Millennials” (19 a 35 años) quienes aprecian el equilibrio entre el trabajo y la vida personal, y no le tienen miedo al cambio. Es por ello, que la directora hace énfasis en esa cualidad, no tenerle miedo al futuro y prepararse para él.

Finalmente, la invitación es a que los alumnos puedan valorarse y confiar en sus posibilidades de aprendizaje. Descubrirse en lo que les gusta, les hace feliz y les produzca curiosidad, cambiar lo negativo por positivo.