Encuentro de Universitarios Católicos: Minorías Creativas II, el desafío de la fe hoy

La iniciativa tuvo como objetivo ser un espacio para compartir la fe y las experiencias pastorales, junto con entender los desafíos de ser auténticos y de generar minorías creativas a nuestro alrededor.

Durante el 27 y 28 de abril, un grupo de 22 jóvenes de distintas regiones se reunió en el IX Encuentro de Universitarios Católicos, organizado por las Cruzadas de Santa María y la Pastoral Santo Tomás Santiago, junto con el apoyo de la Fundación Angelicvm. En la instancia, se abordó el tema las «Minorías creativas», mismo tópico del año anterior, al cual se le dio continuidad por su relevancia y necesidad de conocer personas que provocaron cambios en la sociedad desde su respuesta al seguimiento de Cristo.

En el programa se combinaron momentos de conferencias, charlas y coloquios en pequeños grupos, con la convivencia y expansión, y los diversos momentos de oración. Su objetivo fue fortalecerse en la fe, el compromiso apostólico y formarse bien.

En este contexto, el doctor en Filosofía de la Universidad Santo Tomás, Carlos Casanova, presentó las líneas fundamentales del concepto de minorías creativas (o creadoras, como las denominó Toynbee), con numerosos ejemplos, especialmente de los primeros cristianos. Muchos prejuicios cayeron con sus palabras y dejó latente la inquietud de formarse bien para ser críticos. Por la tarde, se presentaron las figuras de Teresa de Jesús e Ignacio de Loyola y sus ecos en nuestros días.

«A los jóvenes les encantó el énfasis del Hermano David María, fraile carmelita descalzo, en que lo esencial era la amistad de Teresa con Jesús Amigo y su invitación a orar, o la valentía del soldado Íñigo en su conversión, que presentó de manera muy didáctica Raquel Pizarro. En las conversaciones de los coloquios que siguieron se abordaron los temas de manera más personal, cosa que enriqueció el plenario con profundas preguntas y reflexiones», comentó María Esther Gómez, Directora Nacional de Formación e Identidad Santo Tomás.

Al día siguiente, fueron presentados Juan Bosco, el amigo de los jóvenes y su método preventivo de creación de ambientes que favorecieran la virtud y Pedro Poveda, que promovió el papel de la mujer laica en la educación, inspirado en los primeros cristianos y en la espiritualidad de la santa de Ávila. Los expositores fueron  María Victoria González, profesora de inglés teresiana y Juan Pablo Conejeros, doctor en Filosofía y educador en la Universidad Católica Silva Henríquez.

Por otro lado, las exposiciones fueron complementadas con momentos de oración y la vivencia de sacramentos: la Santa Misa, el Rosario de antorchas por la noche, confesores que atendían a los jóvenes, la adoración al Santísimo y la oración personal de la mañana. «La convivencia fue muy alegre y todos participaron, especialmente en la Noche de talentos del sábado por la noche que potenció la creatividad con números y sketchs. De otro tenor, también muy participativas, fueron las asambleas de experiencias apostólicas y la final, que hablaban de recargar pilas, crecimiento en lo espiritual y en lo humano, impulso para seguir sin cansarse o para reanudar después de un tiempo de pausa«, agrega Gómez.

Testimonios

Durante el encuentro, los jóvenes participantes escribieron sobre su experiencia. Entre ellos, Felipe, estudiante de Enfermería de Los Ángeles, explicó que esta instancia fue “un reencuentro con Cristo en el momento que más lo necesitas, en un lugar que es propicio para el estímulo de la fe y el amor al hermano. De una particular forma, notas que todos están en sintonía y que a cada uno le marca algún momento, símbolo o palabra específica. Cada quién llega con sus esperanzas puestas en una nueva aventura, en un nuevo ‘re-amanecer’ de la juventud. Es un cúmulo de emociones que surgen con el paso de las horas y de las profundas conversaciones que se tienen con todos”.

Mientras que Bárbara, alumna de Talca que ha participado tres veces y también estudia Enfermería, aseguró que “una de las frases que más motivación me dio fue ‘las minorías creativas están movidas por agentes divinos’, esto se debe a que tanto como la fe y el amor a Dios mueve a una persona a cambiar y dejar todo de lado para lograr un cambio tanto en uno o en las personas. Así lo hizo San Ignacio Loyola, que dejó su vida pasada para seguir a Cristo y así descubrirse a sí mismo. Todos los jóvenes que se motivan a participar de los EUC siempre terminan descubriendo algo de sí mismo durante estos dos días, las ponencias de cada santo lleva a darse cuenta de lo importante que es tener una fe”.