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Charla abordó estrategias de salud para cuidadores en tiempos de pandemia

Encuentro organizado por la carrera de Terapia Ocupacional UST, sede Concepción, contó con la participación de Antony Sánchez, encargado del Programa de Salud Integral de personas mayores de la Seremi de salud del Biobío; Carmen Oyarzún, Terapeuta Ocupacional y docente de Campo Clínico UST; y Carolina Medina, Terapeuta Ocupacional del Centro Comunitario para personas adultas con demencia “Kelluwün” del Servicio de Salud de Talcahuano.

En este marco, el director de la carrera de Terapia Ocupacional de la sede penquista, Maximiliano Merino, comentó que si bien el cuidado de una persona dependiente está vinculado a una serie de cargas que a menudo conducen a dificultades físicas, psicológicas y emocionales, la charla pretende “contribuir en los cuidados de la salud mental de los cuidadores de personas mayores, considerando que estas personas son las que asumen la responsabilidad total de una persona dependiente, y que muchas veces no se elige hacer esto sino que es una situación que se da de manera circunstancial, por lo tanto, al conocer estas dificultades podemos comprender mejor las necesidades y competencias del cuidador y además aliviar su carga”.

¿Qué significa cuidar a una persona mayor dependiente?

Partiendo del concepto “cuidar” la académica Carmen Oyarzún, explicó que de aquí nace el concepto de cuidador, una persona que asume el cuidado de una persona y que es capaz de forma permanente de otorgar todo el apoyo, la atención, acompañamiento, empatía y contención que una persona dependiente necesita para su diario vivir.

“Todo depende del grado de dependencia que tenga una persona, pero el cuidador pasa a ser un ente tan central que es un apoyo constante en cada una de las actividades que realiza la persona”.

En esta línea, Oyarzún afirmó que existe una brecha grande entre el cuidado que se le brinda a una persona que aun es autovalente a una persona mayor dependiente, pues en este último hay un esfuerzo constante, una dedicación a los cuidados, un impacto en la disminución de los tiempos con la familia donde es posible llegar a renunciar a actividades personales.

A pesar de que el cuidador brinda asistencia la mayor parte del tiempo, destacó que el desarrollo personal va quedando a un lado, pero al mismo tiempo se van adoptando otras habilidades que la persona no reconocía de sí misma, “ellos se dan cuenta de que se vuelven mucho más empáticos, se van validando mucho más y hay una sensación de logro y gratificación constante que va de la mano con la satisfacción del cuidar”, apuntó la joven profesional.

Sobre los cuidadores y nuestra realidad en el país, la académica mencionó que el 85,6% de los cuidadores en Chile son mayoritariamente mujeres, no muy distinto a lo que se viven en otros países pero que visibiliza la inequidad de género que existe en el sistema de salud. “La mujer asume el cuidado como un compromiso moral, marcado por el afecto pero a un alto costo porque muchas veces esta actividad no es remunerada ni valorada, cuidan a sus familiares más de 20 horas diarias y según el estudio nacional de dependencia, 2/3 no ha tomado vacaciones hace más de 5 años, lo que impacta en su calidad de vida porque no logran descansar realmente para volver al cuidado”.

Si bien el cuidar es un acto inherente a la vida, como profesional hizo un llamado a que se empiece a hacer un cambio en relación a los cuidadores, donde prevalezca unas políticas públicas coherentes que vayan acorde a las necesidades de estas personas.

Estrategias para mejorar la salud de los cuidadores

“Cuidarse a sí mismo” es el primer paso de autocuidado. Para reducir el estrés, ansiedad, carga física y emocional que genera la asistencia diaria, la académica Carmen Oyarzún, sugiere realizar estos ejercicios para bajar la tensión y tener fortaleza y capacidad para afrontar los diversos problemas que supone cuidar a una persona dependiente durante el día:

  • Generar un espacio diario para realizar técnicas de respiración unas 4 veces al día.
  • Escuchar música
  • Leer un libro por 20 minutos o 1 hora al día.
  • Realizar actividades en conjunto que sean idealmente placenteras para ambas partes, cuidador y adulto mayor.
  • Leer revistas
  • Mantener contacto social, prohibido el físico pero no el virtual.
  • Escribir cartas, hacer llamadas o enviar mensajes.
  • Pedir ayuda, pues como cuidador/a se debe reconocer cuando se necesita ayuda de otras personas e incluso asistencia médica o terapéutica.

Por otra parte, destacó que dentro del cuidado es importante considerar las 4p, que se refieren a la pausa, planificación, priorización y postura que tenga el cuidador dentro de su rutina y que le permiten darse tiempo para respirar, despejarse y no agobiarse con las tareas indispensables que realiza.

“Tiene que haber un equilibrio para evitar la sobrecarga, con estas estrategias queremos que el cuidador pueda flexibilizar las actividades desde el cuidado propio. En cuanto a la salud mental, hay que evitar el exceso de información, en este tiempo de pandemia vemos a toda hora la televisión lo que nos suma mucha más angustia e incertidumbre, lo más recomendable es informarse dos veces al día a través de medios oficiales”, finalizó la académica.

Tomasinos transformando Chile

Para María José Nova, enfermera, ex alumna de la UST y autora del Libro “Yo te Cuido”, iniciativa de apoyo a cuidadoras de personas con dependencia severa, esta actividad representó un aporte muy importante pues la realidad del cuidador es compleja hoy día, “ellos se enfrentan a la responsabilidad de cuidar con escaso apoyo, y hoy, esto se dificulta mucho más por las cuarentenas y por el distanciamiento físico al que estamos obligados a mantener, si antes el cuidado contaba con escazo apoyo ahora esta situación empeora sin contacto físico”.

(…) Aquí también es relevante tener en cuenta lo importante que es pedir ayuda, ya que el cuidador de por sí le cuesta movilizar a la familia la responsabilidad de cuidar, ellos no tienen esas herramientas comunicacionales como para pedir ayuda, y con respecto a esto, una de las cosas que más rescaté de la charla son estas herramientas que entregaron para ampliar las redes de apoyo y sobretodo en estos tiempos de pandemia”, detalló la joven.

De esta manera, la ganadora del Concurso de Innovación Social de Santo Tomás“Transformar para Impactar”, reflexionó e hizo un llamado a los estudiantes a ser parte de las iniciativas que buscar dar acompañamiento y contención a los adultos mayores, “me parece que es urgente masificar esto y hacer un llamado a los profesionales y alumnos a participar y transformarse en esa mano que ayuda quizás a una persona que vive sola y que no tiene a nadie más”.

Aportes a esta noble labor

En tanto, Carolina Medina, Terapeuta Ocupacional del Centro Comunitario para personas adultas con demencia “Kelluwün”, destacó que a través de esta red de apoyo se está trabajando a nivel regional para mejorar la calidad de vida de las personas que viven con demencia, a sus cuidadores y familias, mediante intervenciones ambulatorias intensivas, transitorias, integrales e interdisciplinarias.

“El trabajo con los cuidadores es un gran desafío, ellos están expuestos a factores estresantes. Dentro de cuales se destacan las dificultades financieras, de tiempo, necesidades emocionales insatisfechas y riesgo cardiovascular, lo que presenta mayor riesgo a padecer trastornos de ansiedad y depresión”.

Sobre el acompañamiento y estrategias de teleasistencia que se le están otorgando a las personas mayores, el encargado regional del Programa de Salud Integral de las Personas Mayores del Departamento de Salud Pública y Planificación Sanitaria de la Seremi de Salud del Biobío, Antony Sánchez Castillo, destacó que las políticas públicas van enfocadas en abarcar a la mayor parte de la población pero que ha sido un desafío tremendo, debido a que la población más afectada por la pandemia corresponde a la población más vulnerable de Chile, los adultos mayores.

“La salud no solo depende del Ministerio de Salud, sino del apoyo de las demás instituciones y la responsabilidad que tenemos cada uno de nosotros como ciudadanos para prevenir y evitar que incremente el número de contagios y que hoy día son alarmantes”.

Frente a la contingencia, hizo referencia a las plataformas y programas que desde el Minsal se están implementando para atender a las personas mayores y a sus cuidadores, entre las que se destacan: Hospital Digital, “Médicos en tu barrio”, “UdeC-Servicio de evaluación de Riesgo Covid-19”, y “Salud responde”. Finalmente, agradeció la invitación a la charla destacando la labor y el foco estratégico en el que está centrada la institución y que busca posicionar al adulto mayor como un entorno relevante. “La labor que están realizando como academia es súmamente relevante y más en estos tiempos, lo que ayuda a que la información circule y que todas las personas conozcan distintas realidades a las que están expuestos nuestros adultos mayores”, detalló.