Experto UST explica que

Tomar conciencia y hacer uso responsable de los recursos es clave para rescatar la huella ecológica en el país

Heraldo Norambuena, biólogo en gestión de recursos naturales y doctor en sistemática y biodiversidad del Centro Bahía Lomas, Universidad Santo Tomás, compartió un balance de este nuevo déficit que lidera el país en su biocapacidad.

“Es desastroso, pero no sorprendente. La huella ecológica en la que se basa este sobregiro ecológico no es algo nuevo. Desde que se acuño el termino en 1996 por Rees y Wackernagel, se ha convertido en la única métrica que compara la demanda de recursos de individuos, gobiernos y empresas con la capacidad de la Tierra para la regeneración biológica”, afirmó el experto.

Un día antes que, en 2020, la Red Global de la Huella Ecológica determinó que por segundo año consecutivo Chile es el primer país latinoamericano en agotar su “línea de crédito” ambiental, una realidad que para el experto requiere no solo de consideraciones políticas sino también sociales para tomar conciencia respecto al planeta y su naturaleza.

Pero, de qué manera se pueden crear o establecer estrategias que permitan una mejor administración de los recursos naturales, al respecto Norambuena explicó que esta tendencia negativa requiere cambios profundos, tan profundos que se podrían requerir consideraciones a nivel constitucional. “Nuestro modelo de desarrollo se basa en la extracción de los recursos naturales, en donde la producción esta por sobre el bien común. Necesitamos un giro estratégico que permita el uso sustentable de los recursos naturales, esto además requiere un desarrollo en términos de ciencia y tecnología, más allá de los espacios a los que estamos acostumbrados como las universidades. Debemos realizar más ciencia y tecnología I+D en la industria y empresas, el cambio de paradigma debe ir de la mano con la generación de conocimiento”, aseguró el investigador.

Según los últimos de GFN, la biocapacidad de Chile es de 3,5 hectáreas globales (gha) por persona y su huella ecológica es de 4,3 gha por persona; situación que arroja un déficit de 0,8 gha. En los años más recientes, el Día del Sobregiro Ecológico de Chile (Overshoot Day) se ha movido de la siguiente forma: 24 de mayo (2017); 2 de junio (2018), 19 de mayo (2019), 18 de mayo (2020) y 17 de mayo (2021).

¿Qué está pasando en Chile?

Aunque las mediciones siguen siendo negativas, la experiencia de los últimos años y la evidencia científica reiteran que la mejor forma de alcanzar un desarrollo sólido y duradero es asumir un enfoque sustentable, en el que los esfuerzos se centren en hacer las cosas bien y de manera más respetuosa hacia la naturaleza.

“Esto no pasa por un tema tecnológico o de capacidades, países del primer mundo han sido capaces de desarrollar industrias realmente amigables con el medio ambiente. Esto pasa por políticas de estado que busquen el desarrollo sustentable, si queremos revertir esto, debemos dejar de hacer las cosas a la “chilena” y cambiar el eje de explotación sin interés en el medio ambiente, al uso sustentable de los recursos y la implementación de instrumentos transversales como la evaluación ambiental estratégica”, agregó.

Las consecuencias de que Chile sea un país extractor de recursos naturales, trae como consecuencias un fuerte impacto ambiental y un gran llamado de atención importante, sobre todo en el contexto actual de pandemia y crisis económica y social en la que se encuentra el país. “Si mantenemos el ritmo de explotación sin generar medidas fuertes de conservación de sitios con alta biodiversidad, o programas de restauración ecológica, difícilmente podremos revertir este fenómeno”, señaló el académico.

Sin duda, el nuevo escenario político que vive Chile plantea una nueva constitución y una nueva manera de hacer las cosas para desarrollar estrategias que llevan al país a ser un modelo estándar “OCDE” en el que no se destruya todo al paso, ya que el costo que se está asumiendo a raíz de este sobreconsumo es alto, lo que da cuenta de la conducta socio ambiental que tiene la población en términos de uso de los recursos naturales.

“La verdad es que no tenemos una política de estado para resolver nuestro sobreconsumo. De momento lo más cercano es el Proyecto de Ley Marco de Cambio Climático, que posee como uno de sus grandes objetivos llegar a carbono neutralidad en Chile al 2050. No obstante, este proyecto de ley descansa en el Congreso Nacional desde agosto del año 2020. Nuestra legislación ambiental aún es débil, esta orientada a favorecer la instalación de la industria, la única manera de frenar un proyecto de inversión que afecte la biodiversidad es a través de la organización social y una fuerte lucha mediática, ¿no debería ser rol del estado procurar la conservación de los recursos naturales? ¿por qué debemos llegar a la lucha socioambiental para revertir un proyecto que claramente impacta el medio ambiente? Las zonas de sacrificio, HidroAysén, Pascua Lama o Isla Riesco son ejemplos de esto”, confesó el biólogo de la UST, Heraldo Norambuena.

Tomar conciencia y hacer uso responsable de los recursos es clave para rescatar la huella ecológica en el país, desde utilizar lo necesario a la hora de consumir y eliminar alimentos, reciclar, cuidar las energías limpias y contribuir con el medio ambiente y su biodiversidad con algunas de las recomendaciones más importantes que ayudarán a conservar el capital natural. Pero sin duda, se espera que los cambios reales se generen principalmente desde una escala macro a nivel industrial, ya que son las industrias las que explotan los recursos naturales y las que generan mayores impactos.