La actividad se realizará el miércoles 28 de mayo entre las 11.30 y las 14.30 horas en el patio de vidrio de la sede e incluirá disciplinas milenarias como la caligrafía china y las pulseras de 5 colores.

La caligrafía china, más que una simple forma de escritura es considerada un arte visual de profunda tradición y significado cultural. Durante siglos, fue la forma de arte más valorada en China, incluso por encima de la pintura, compartiendo con ella las mismas herramientas esenciales: el pincel y la tinta. Su maestría no solo requería habilidad técnica, sino también una profunda comprensión de la estética, la composición y el carácter del escritor, convirtiéndose en una vía de expresión personal y un reflejo del nivel cultural y la sofisticación del individuo.

Por su parte, la tradición de las pulseras pentacromáticos se remonta a la dinastía Han, estrechamente relacionada con la antigua teoría de los cinco elementos y las prácticas para alejar males y epidemias. Los antiguos creían que los cinco colores correspondían a los cinco elementos (metal, madera, agua, fuego y tierra), poseyendo el poder de armonizar el yin-yang y expulsar espíritus malignos. Dentro de este contexto, llevar pulseras de cinco colores durante la Fiesta del Bote del Dragón es una costumbre tradicional china con profundas connotaciones culturales y significado simbólico.

Ambas disciplinas podrán conocerse a través del Club Chino «Día de Experiencia Cultural del Festival Duanwu» del Instituto Confucio Santo Tomás el miércoles 28 de mayo, ya que entre las 11.30 y las 14.30 horas sus profesoras nativas estarán practicándolas en el patio de vidrio de la UST Santiago, ubicada en Av. Ejército Libertador 146, en Santiago.

La actividad se enmarca en la Fiesta del Bote del Dragón, celebración tradicional china con una historia que se remonta a más de dos mil años. Se conmemora el quinto día del quinto mes lunar, que este año recae el sábado 31 de mayo. Esta festividad está profundamente arraigada en la leyenda del patriótico poeta Qu Yuan, quien se ahogó en el río Miluo en protesta contra la corrupción de su reino. La gente, en un intento por salvarlo o al menos recuperar su cuerpo, salió en botes y arrojó bolas de arroz al río para evitar que los peces se lo comieran, dando origen a muchas de las costumbres que perduran hasta hoy.

Si bien a través de este Club Chino se conmemorará esta festividad este mes, el Instituto Confucio Santo Tomás la celebra de manera oficial el mes de octubre, a través de la realización de un Festival del Bote de Dragón, que este año tendrá su tercera versión, y que considera competencias de remo, junto a diferentes agrupaciones de Remadoras Rosas, todas ellas supervivientes de cáncer de mama.