Esteban González: “Hay que masificar el voluntariado para que se den cuenta que la juventud está tratando de cambiar la sociedad”.

El estudiante de Técnico en Deportes participó en los Trabajos Voluntarios de Invierno, aportando junto a su cuadrilla con la creación de un huerto y remodelación de juegos infantiles para niños de la comunidad.

Motivado por sus ganas de aportar y volver a vivir la experiencia del voluntariado, el alumno de Técnico en Deporte Esteban González decidió participar en los Trabajos Voluntarios de Invierno de Santo Tomás.

Instalado en el Liceo María Carvajal de Alhué, el estudiante de la sede Santiago Centro que participó por primera vez en el voluntariado de Santo Tomás, nos cuenta que esta no es su primera experiencia en este ámbito

“Cuando era niño participé en misiones y voluntariado por la iglesia (movimiento Schoenstatt) y recorrí distintas ciudades del norte y sur de Chile, pero ahora quería volver a retomar esta experiencia que tuve cuando chico y vivirlo desde el ámbito de la educación superior”.

Trabajo en equipo intersedes

Esteban llegó junto a un compañero hasta Alhué para participar en los Trabajos de Invierno. A pesar de que en un inicio no conocía a la mayoría del grupo, pronto pudieron entrar en confianza y conocerse mejor.

Junto a su cuadrilla, trabajaron en la creación de un huerto y la reparación de los juegos infantiles del Liceo de Huelquén, actividad en que pudieron trabajar en equipo con compañeros de distintas sedes y dejar un espacio útil y bonito para los niños de la comunidad.

“El trabajo fue muy bueno y lo mejor es que el huerto surgió con ideas de todos. El profesor que nos guió nos dio un concepto global y todos empezamos a dar distintos tipos de ideas, y quedo genial ya que empezamos a juntar distintas cosas, como neumáticos, botellas, cajas para ir arreglando todo, y se logró un muy lindo trabajo”.

Al finalizar esta labor, Esteban incluso apoyó a sus compañeros de otra cuadrilla a terminar los trabajos de una casa del sector, conociendo también esta realidad y colaborando con el forrado y postura de cielo raso de la vivienda.

Pensar en comunidad

Luego de cinco días de arduo trabajo, la experiencia de voluntariado llega a su fin, pero es algo que sin duda dejó huellas en Esteban y en que se generaron nuevos lazos de amistad y compañerismo

“Fue bueno compartir con compañeros de otras sedes de la Región Metropolitana y Rancagua y a pesar de que al principio estábamos más tímidos después nos soltamos y conversamos y nos vamos a extrañar yo creo, pero nos seguiremos comunicando por Instagram”.

Además del compañerismo, Esteban resaltó la importancia del trabajo voluntario y de difundir para que otros se motiven con esta hermosa labor:

“Hay que tratar de masificar esto para que podamos llegar a muchas más partes y que se den cuenta que la juventud está tratando de cambiar un poco la sociedad y tratando se no ser tan individualistas y que pensemos más en comunidad”.