Primeros resultados de proyecto “Cultura científica en biotecnología":

Soledad Quiroz: «Comunicar sobre ciencia no se trata de simplificar la información, sino mostrar lo complejo del trabajo y lo valioso que es»

El proyecto “Cultura científica en Biotecnología: estudio prospectivo en base a expertos” tiene como propósito principal explorar los contenidos básicos que la opinión pública debiese manejar para una adecuada comprensión de la biotecnología.

Existe un acuerdo sobre la necesidad de socializar el conocimiento científico, es decir, que los actores sociales puedan comprenderlos y asimilarlos. Que la sociedad conozca el real impacto de la biotecnología, más allá de lo económico, sino que también el impacto asociado al bienestar que entrega a la sociedad.

«Estamos en una época en la que la ciencia salió del aula y es necesario que los puntos o tópicos que tienen impacto y relevancia para la sociedad sean entendidos por la sociedad«, dice Soledad Quiroz, Jefe de la carrera de Biotecnología de UST Santiago.

Esta necesidad es la que motiva el proyecto “Cultura científica en biotecnología: estudio prospectivo en base a expertos”, que explora, a través de la consulta a expertos, los contenidos básicos que la opinión pública debiese manejar para una adecuada comprensión de la biotecnología. Para esto, el papel de los comunicadores y de los medios de comunicación es clave. “A los centros de investigación y a los científicos se nos pide cada vez más tiempo y dedicación a comunicar nuestros resultados, no solo a nuestros pares, sino que también al resto de la sociedad. Ahí necesitamos ayuda. Para los científicos trabajar con comunicadores es muy valioso. No se trata de simplificar la información, sino que justamente lo contrario: es comunicar lo complejo que es y al mismo tiempo lo valioso que es”, explica Soledad.

“Para indagar en la comprensión pública de la ciencia, partimos este proyecto desde las percepciones y opiniones de expertos biotecnólogos respecto a ciertos tópicos que se dan en el ámbito de las comunicaciones, para después pensar en generar ciertas estrategias de comunicación que aporten a que, en definitiva, la biotecnología pueda ser comprendida a nivel social”, precisa Soledad Quiroz, quien está a cargo de este proyecto.

Quiroz trabaja en este proyecto junto a Claudia Daneri, académica de la Facultad de Ciencias Sociales y Comunicaciones. Anteriormente, Claudia trabajó en una investigación de un año en la que realizó un análisis de contenido y semiótico del diario El Mercurio. “En esta investigación ya comenzamos a notar ciertos temas que dan cuenta de que no hay una especialidad realmente, sino que hay una transformación, una traducción de la nota científica. En este estudio hay una concordancia respecto a los puntos que hemos estado descubriendo con esta nueva investigación, sobre cómo se deben informar o dar a conocer a la población ciertas temáticas científicas”, explica Claudia.

De la Facultad de Ciencias Sociales y Comunicaciones, se incluyen en este proyecto a dos tesistas. “Son dos estudiantes que en su vida se imaginaron hacer una tesis en ciencias y que quedaron muy interesadas. Se les abrió un mundo. Eso también es muy interesante, abrir esos mundos a los alumnos, que lo disfruten. Al final esto se trata de que los distintos nichos tienen puntos de encuentro, entonces ¿Cómo hacer que estos puntos de encuentros coincidan?”, añade Claudia.

Por su parte, Soledad Quiroz, con la convicción de que el conocimiento científico no puede separarse de la sociedad, ha formado parte de la organización de los Talleres “Ciencia y Ciudadanos” y de charlas cómo “Making Science Impactful”, dictada por el asesor científico del gobierno de Nueva Zelanda, Peter Gluckman.  “En este nuevo proyecto estamos mezclando, combinando, nuestras líneas de investigación”, dice Soledad.

El punto de vista de los expertos

La primera etapa contó con una serie de entrevistas a expertos para poder elaborar una encuesta que se enviará dentro de los próximos días. Se espera que la información obtenida durante la duración de este proyecto, a través del método Delphi, permita elaborar una propuesta estratégica de divulgación para la biotecnología.

¿Cómo ven la labor de la prensa y los medios de comunicación? ¿Qué dificulta el entendimiento de los contenidos en biotecnología, ciencia y tecnología? ¿Qué lo facilita? ¿Cuáles son las técnicas que consideran que pueden acercar a las personas a la biotecnología? Son algunas de las temáticas que se están abordando durante la etapa de recolección de información de este proyecto.

Durante la realización de las entrevistas, ya se vislumbra cierto consenso en cuanto al estado de la relación entre biotecnología y comunicaciones. “Nos hemos dado cuenta de que las lógicas de los biotecnólogos no son precisamente las lógicas de los medios de comunicación. Por ejemplo, el tema de las vacunas es recurrente. Éstas aparecen en los medios de comunicación asociadas a ciertos riesgos que se instalan y que es muy difícil de desinstalar. Necesitamos una estrategia para que se encarga de difundir la información, note qué es lo realmente relevante de comunicar. Por ejemplo ¿cuáles son los últimos resultados que hay en estudios sobre vacunas?”, ejemplica Claudia.

Soledad Quiroz complementa: “no es que las vacunas estén exentas de riesgos, los tienen. Tú te puedes sentir mal un día o dos, pero sin vacuna el riesgo que corres es enfermar, morir o quedar cuadraplégico. La responsabilidad es de los científicos y del comunicador. Que ambos estén en la misma página es súper relevante.”

Respecto a factores que impiden el entendimiento de la biotecnología, se levantan de parte de los expertos algunos puntos importantes, entre ellos: el uso lenguaje técnico y la distancia que existe entre los comunicadores y los científicos. “No solo hay que verla desde el punto de vista de las temáticas que los comunicadores elijen comunicar, sino que es una distancia que también pasa por tener diferentes concepciones de lo que realmente es importante. Quien determina qué es importante para un medio es el editor, no precisamente la persona que está en el área. Hay temáticas que para los científicos son cruciales y muy relevantes, pero que no resultan atractivas para los comunicadores”, explica Claudia.

“Además, la mirada de los medios es cortoplacista. Hay que entender que los resultados no salen de un sombrero de mago. Los medios no dan cuenta del trabajo que implica llegar a esos resultados. Es importante dar a conocer estos procesos, para saber cuál es la labor real que se está realizando. Por qué aparecen estos resultados y cómo aparecen. La ciencia no se hace de a uno: mi tesis de doctorado no llegó a ninguna conclusión clara, pero sí abrió otras tres tesis de doctorado, que, junto a otras tesis de doctorado y veinte años de investigación de mi profesor, llegaron a algo. Hay que capacitar a los comunicadores para que puedan entender eso, para cortar con la lógica de lo inmediato, de ‘ya se aportó, pasemos a otro punto’”, agrega Soledad.

Por último,se habla de las expectativas que tienen los expertos respecto al comunicador: la rigurosidad, la capacitación, el ánimo que puedan tener de indagar de una determinada materia. “Este último punto es importante, incentivar a la población a fortalecer el área científica. En la medida en que también nosotros podamos generar como país nuevos científicos, más científicos, esto puede generar un aporte en distintos planos”, concluyó Soledad.