La rabia es una enfermedad vírica infecciosa que causa la muerte de 60.000 personas al año en el mundo y está presente en todos los continentes a excepción de la Antártica. Prevenible por medio de la vacunación, la presentación de la enfermedad neurológica es inconfundible, por lo mismo se da el término de rabia o rabioso a los mamíferos que se infectan y para cualquier mamífero es mortal.

Los primeros relatos de rabia en nuestro país fueron de Charles Darwin, el comentó en su bitácora de viaje que en los valles de Chile pudo observar hidrofobia, principal característica de manifestación del virus, pero no es hasta el año 1879, que clínicamente se comienza a hablar del virus, esto es gracias a un cirujano de la Armada que reportó tres casos de rabiosos atendidos por él y los plasmó en su tesis de grado.

La rabia tiene dos presentaciones, silvestre y doméstica, en nuestro país la variante doméstica está erradicada desde el año 1972, donde el último enfermo por esta variante se presentó en Chillán. Los últimos animales enfermos por rabia han sido por causa de la variante silvestre, cepa propia del murciélago, por lo tanto, nuestro país está libre de rabia doméstica, pero no así de esta variante.

Esta enfermedad se transmite por la mordedura de los animales infectados, mediante la saliva, pero principalmente la mordedura, se han documentado casos de inhalación del virus, esto se dio principalmente por estar en una cueva infestada de murciélagos. En el caso de nuestro país el contagio, después de 1972, ha sido principalmente por contacto con el murciélago insectívoro, Tadarida brasiliensis.

Todo veterinario que reciba en su consulta un animal con síntomas neurológicos propios de la rabia, o un humano que llegue a un centro asistencial con signos de rabia, debe ser avisado de forma inmediata a la autoridad sanitaria, ya que esta enfermedad es de declaración obligatoria, DTO. N° 158/04.

En nuestro país, según el último boletín del Instituto de Salud Pública, entre los años 2010 – 2014 se recibieron 9.253 muestras de origen animal para la vigilancia de rabia, del total de muestras procesadas un 5.2% fueron positivas al virus. La mayor cantidad de muestras fueron de la Región Metropolitana, Biobío y Valparaíso, todos los resultados positivos provenían de muestras del murciélago insectívoro.

La rabia no solo es una enfermedad importante a nivel nacional, sino que también a nivel mundial, tanto así que se creó una alianza global para el control de la rabia, y el propósito principal es erradicar esta mortal enfermedad, por lo mismo se creó el Día Mundial de la Rabia, que se celebra cada 28 de septiembre, con el propósito de orientar los esfuerzos y concientizar a la gente de lo mortal que es y así promover su prevención y educación a nivel global.

En esto último mencionado, los médicos veterinarios somos de vital importancia para seguir manteniendo la erradicación de la variante doméstica, promover la educación de la población mediante charlas para que se conozca sobre el virus y lo que provoca, además de métodos de prevención, como lo son la vacunación anual de nuestras mascotas, ésta última ha sido clave y la más importante en la erradicación.