Mitos y realidades sobre el aumento de peso

Existen mitos y realidades con respecto al ejercicio y que están muy incorporados en la población y que es necesario aclarar. Uno de estos aspectos es la preocupación constante y que tiende a primar en algunos períodos del año, como posterior a las Fiestas Patrias y/o fiestas de fin de año, que dice relación con el peso corporal, la mayor ingesta y, por ende, con la estética corporal.

Es bien sabido por una gran cantidad de estudios que así lo confirman, que existe una asociación importante entre el aumento del peso corporal (o del IMC) y el riesgo de sufrir una amplia gama de enfermedades como hipertensión arterial, diabetes, infartos agudos al miocardio y accidentes cerebro vasculares. Frente a esto caben las siguientes preguntas: ¿Cuál es el efecto del aumento de peso corporal y qué tan importante es en el estado de salud de las personas?, ¿existe una relación entre el aumento de peso y la capacidad física de las personas? Espero poder aclarar algunos de estos aspectos en las siguientes líneas.

En primer lugar, efectivamente se ha comprobado que el aumento de peso y del IMC está asociado a un estado de sobrepeso u obesidad que tiene dos características esenciales, como son una mayor ingesta y un menor gasto asociado a actividad física, por ende, a una acumulación anormal de energía en el cuerpo. Pero tanto el peso corporal como el IMC presentan deficiencias en su interpretación que son importantes de considerar: NINGUNO de estos indicadores indican qué componente de la composición corporal aumenta, ya que el sobrepeso u obesidad se definen por el aumento de la masa adiposa dentro del cuerpo; tampoco indican la cantidad de masa adiposa, ni menos su distribución, por lo que, a pesar de ser un criterio diagnóstico, presenta limitaciones importantes para su uso. Es por esto que surge una nueva pregunta: ¿será tan importante preocuparse por el peso corporal? Al parecer tiene mayor relevancia la composición corporal, el tipo y distribución del tejido adiposo.

En segundo lugar, ¿puede una persona tener una buena capacidad física?, la respuesta es un rotundo. Así como en el caso del sobrepeso y obesidad existe un aumento anormal de tejido adiposo, se puede aumentar el componente muscular, aumentando de igual manera el peso corporal e IMC. Pero este aumento de masa muscular siempre será un protector para la salud y buena capacidad física, pero que según las categorías de peso e IMC sería considerado como “obeso”. Por otro lado, se ha observado que personas con sobrepeso pero activas aprovechan su exceso de peso como un elemento de sobrecarga, que aplican un estímulo importante sobre el sistema músculo esquelético, manteniendo o aumentando su capacidad funcional.

Por último, frente a cuadros como diabetes e hipertensión, se ha podido observar que es posible mejorar su estado de salud, mediante ejercicio físico, o este combinado con la administración de fármacos, pero que los cambios que se producen son independientes de modificaciones de peso, IMC y composición corporal. Esto indica que los cambios fisiológicos que explicarían las mejoras en los estados de salud no van a la par de los cambios morfológicos o los cambios visibles de peso corporal.

Todos estos aspectos mencionados, deben ser bien sabidos por la gente y comentarlos a su vez, ya que son aspectos importantes para entender cómo funcionan los fármacos, el ejercicio y no dejarse llevar en muchas oportunidades por el “conocimiento popular”.