20 niños del Jardín Infantil «Semillitas» de Avellanal, perteneciente a la comuna de Calbuco, recibieron un estudio completo del oído realizado por docentes y estudiantes de la Escuela  de Fonoaudiología de Santo Tomás Puerto Montt.

Otoscopías, timpanometrías y evaluaciones de emisiones otoacústicas fueron las atenciones que recibieron los niños y niñas del Jardín Infantil «Semillitas» de Avellanal en el operativo realizado recientemente por docentes y estudiantes de la Escuela de Fonoaudiología de Santo Tomás Puerto Montt.

Esta actividad, de acuerdo a lo señalado por Víctor Calvo, Director de la Escuela de Fonoaudiología UST presenta gran valor considerando la importancia que tiene la detección temprana de problemas fonoaudiológicos en niños de edad pre- escolar:

“En el ámbito de la audiología resulta fundamental el diagnóstico precoz de deficiencias auditivas, con el objetivo de evitar o reducir las consecuencias en el desarrollo del lenguaje, habla e interacción social que pudiese llegar a afectar a un niño o niña con hipoacusia”.

Apoyo a la comunidad

El Director de la Escuela de Fonoaudiología destacó además lo relevante que es que desde las universidades se puedan generar estas acciones concretas y que van en directa ayuda a la comunidad; “creo que el colaborar con los lugares donde estamos insertos como Escuela  es fundamental para lograr entender y ayudar de mejor manera a las comunidades. Al escuchar sus necesidades es una excelente forma de saber lo que se espera de nosotros como actores sociales” explicó.

De la misma forma, este operativo fue altamente valorado por Marlene Cárdenas, Directora Jardín Infantil “Semillas” de Avellanal quien agradeció la presencia de estos profesionales:

“Como educadora de párvulos a cargo de este establecimiento puedo evaluar esta intervención como una instancia sumamente valiosa desde la mirada preventiva frente a posibles dificultades que nuestros párvulos puedan eventualmente presentar y permita detectar y entregar los tratamientos pertinentes en el menor tiempo posible con mayores posibilidades de obtener mejores resultados. Otro elemento que puedo rescatar es que en la realidad de jardines infantiles rurales las prioridades de muchas familias no son acceder a un profesional de fonoaudiología sino más bien a otros profesionales, dejando un poco de lado acciones preventivas y más orientadas a las dificultades de aprendizaje”, acotó la Directora.